Cruzando suramerica parte 4: ¡Adios Cucuta! ¡Hola inacabables carreteras!

Retomo mis anecdotas sobre el viaje por escalas que hice para llegar a Chile junto a mi amada. He estado algo ocuado con asuntos varios y estas últimas semanas es cuando h vuelto a estar desocupado, también que la transición con mi idea original de Steemit que sería más donde realizaría publicaciones más personales a diferencia de mi antiguo blog tuve que hacerla a un lado, ahora mi blog en esta plataforma será un poco de ambas, la idea original que tenía para este medio y lo que ya venía haciendo con wordpress, en fin, esta readaptación me ha tomado más tiempo del esperado, pero en fin, así continué mi viaje...

Acostumbro a despertar temprano, manía que tengo de infacCia porque me gustaba ver los bloques animados que los canales de tv abierta ofrecían sábados y domingos desde tempranas horas de la mañana y así que como de costumbre ya bien temprano mi día inicio. Fui al parque de Los Proceres porque en un punto específico llegaba señal de Digitel y aproveché de tontear en internet, cuando Jesús se levantó caminamos los alrededores del poblado y seguimos comiendo papas rellenas, los demás se fueron levantando de sus largos sueños y un par de horas después la gente de JMJM Viajes enviaron sandwich para que todos los que nos quedamos allí desayunaramos, así comimos un poco más y entre siestas y caminatas se hicieron las tres de la tarde, hora aproximada en la que nos fueron a buscar para volver a JMJM

Volvimos a la Parada, solo que esta vez estábamos bien bañados, descansados y con nuestros esfinteres evacuados, en algún momento iniciaría la travesía por Colombia y no sabíamos cuando tendríamos esas oportunidades nuevamente, pero nuestra oportunidad de salir volvía a lo incierto, eso sí volvió, veíamos nuevos buses, habían muchas más personas en la casita de la agencia de viajes y muchos temores bien infundados por las falsas ilusiones con las que el encargado de la empresa nos tenía pues ya bastante que había prometido la cercanía de nuestra partida y este era nuestro tercer día en Colombia, sin embargo este muchacho se veía más seguro que las veces anteriores.

En efecto, a las 8pm llegaron dos autobuses y luego llegaron otros tantos, ahí Jesús y yo nos separamos de Eneuri, José, Génesis y Genaro, mientras que la señora Luz con su familia, Jesús y yo nos pudimos ir en uno que salió cerca de la medianoche, al abordar nos dieron una crema dental pequeña y un pequeño refrigerio para el viaje que consistía en un par de chupetas y un cartón pequeño de jugo si mal no recuerdo, aquí debo señalar que estuvo mucho mejor lo que nos regaló Eneuri antes de despedirse de mi persona.

El bus mmm... no era un bus de lujo, pero tenía en efecto para cargar los celulares de los pasajeros, señal de internet wifi que dentro de lo que cabe funcionó bastante bien, al menos yo pude ver el capítulo de Dragonball que correspondía a ese fin de semana en cuestión, me mantuvo en contacto con mis conocidos y los de Jesús quien como antes ya lo había mencionado, viajaba sin equipo celular para comunicarse con su familia en Venezuela y Chile. A eso de la 1:30am con los temores paranoicos de no saber con quienes viajaba medio dormí, desperté varias veces pero la casi definitva fue ya casi a las 6am, otro rato a eso de las 8am, pero a las 9am ya estaba bien despierto. Nos avisaron que pronto haríamos parada para desayunar pero igual advirtió la guía del bus que por el retraso que sufrieron los buses y la hora a la que llegaríamos al punto para desayunar dificilmente estaríamos llegandoa donde almorzaríamos a tiempo, pero ese no sería el caso con la cena y las comidas del día siguiente... sí, mejor dejo este parrafo en puntos suspensivos..

Cruzando Puerto Araujo

Paramos en algún sitio donde no recuerdo donde, tuvimos un buen desayuno/almuerzo y a continuar el viaje. Aquí no hay mucho que contar, bellos paisajes de las montañas y llanos colombianos, gente roncando, otros quejandose por los motivos que le nacieran en la ocasión y listo. Ya avanzada la noche hicieron parada en un comedero, aquí nos hicieron la primera mala jugada pues la guía del bus insistió en que la cena noe staba dentro del presupuesto del viaje, si queríamos comer algo debíamos pagarlo. En el sitio la comida no era tan cara pero al menos Jesús y yo no quisimos arriesgarnos a seguir gastando, el viaje apenas iniciaba y no teníamos certeza de lo que el camino podía deparar, así que gracias a que el día anterior cuando volvimos a la parada decidimos comprar unas cuantas provisiones previsorias pudimos comer un poco esa noche. La gran mayoría de los pasajeros del bus hizo lo mismo, recurrieron a lo que llevaban guardado en el equipaje, así, molestos por la mala jugada abordamos una vez más y continuamos el viaje.

Otro día terminaba, este sería el primero casi entero de pura carretera, cada vez que podía me comunicaba con Génesis y Eneuri, teníamos la esperanza de volvernos a encontrar en el Puente Rumichaca antes de salir oficialmente de Colombia o de entrar a Ecuador, así supe que en algún momento nuestro bus los había adelantado por unos cuantos minutos aunque ellos salieron al menos una hora antes de las instalaciones de JMJM Viajes.

Ya habían pasado seis días desde que salí de mi pueblito.
Cinco días desde que salí de Caracas
Cuatro días desde que llegué a Colombia

Todas las fotos aquí publicadas fueron realizadas por mi persona en algún momento de Enero en Villa del Rosario y lo que vino después antes de llegar al Puente Rumichaca

Para leer las partes anteriores de mi travesía hacia Chile, click en los enlaces de abajo.

Cruzando suramerica parte 1: ¡Adios mi maltratado país!
https://steemit.com/diaporavenezolana/@mosescorc/cruzando-suramerica-parte-1-adios-mi-maltratado-pais

Cruzando suramerica parte 2: ¡Hola hermana patria! La Plata y el boleto...
https://steemit.com/diaporavenezolana/@mosescorc/cruzando-suramerica-parte-2-hola-hermana-patria-la-plata-y-el-boleto

Cruzando suramerica parte 3: Un día eterno: ¡La incertidumbre y la calma!
https://steemit.com/diaporavenezolana/@mosescorc/cruzando-suramerica-parte-3-un-dia-eterno-la-incertidumbre-y-la-calma