Otro ejemplo seria la palabra “table” (mesa) si la persona la lee sin aprender pronunciación primero, la pronunciará /table/ en vez de pronunciar /teɪ bəl/.

Errores comunes como pronunciar /i/ en vez de pronunciar /I/ o pronunciar /e/ por /ə/ pueden evitarse trabajando primero con la comprensión auditiva y la expresión oral, avanzando a la lectura y escritura cuando ya se comprenda y se hable el idioma.

En cuanto a las actividades que podemos hacer con nuestros estudiantes para mejorar su oído, son muy variadas:

Trabajar con autentico material: Es recomendable llevar audios con diálogos, comerciales, noticias y/o conferencias hechas por nativos y luego de escucharlo en clase, se pueden intercambiar preguntas sobre el audio.

Escuchar canciones: La música es sin duda una de las formas más divertida de practicar el idioma, el instructor puede llevar una canción incompleta para que los estudiantes intenten completarla. También como ejercicio individual y autodidacta, el alumno puede escuchar canciones en su casa e intentar escribirlas. De esta forma práctica la comprensión auditiva y también la escritura.

Escuchar Adivinanzas: son otra forma divertida de aprender y es un ejercicio tanto como de comprensión auditiva como de expresión oral.

Dictados: Son excelentes para trabajar la comprensión auditiva simultáneamente a la escritura.

Entrevistas a desconocidos: Si está dentro de las posibilidades, se puede invitar a otra persona para que los estudiantes lo entrevisten. Los alumnos suelen acostumbrarse a la voz de su profesor y entenderle solo a él. Hay academias donde cada clase la da un instructor distinto para evitar esta situación, pero si este no es el caso de tu instituto, siempre está la opción de invitar a alguien nuevo.

Juegos: Sirven tanto para niños como para adultos, hay muchos juegos que se pueden hacer para practicar la comprensión auditiva, uno de ellos es con dibujos: Se trabaja en parejas, una persona dicta a su compañera una serie de objetos y la posición en la que se encuentran, los objetos los observa en una tarjeta que su compañera no puede ver. Mientras esta estudiante dice en voz altas los objetos, la otra persona debe dibujarlos rápidamente en la pizarra, antes de que se acabe el tiempo previamente estipulado (30 segundos a un minuto dependiendo del dibujo) aquellos estudiantes que tengan más aciertos son los ganadores. Está actividad es perfecta para practicar las preposiciones de lugar y “there is/are”

La persona con la tarjeta llena de dibujos estará practicando la comunicación oral ya que deberá saber cómo expresarse para que su compañero le entienda, mientras el que escucha pondrá en práctica la comprensión auditiva, intentando reconocer lo que le dice su compañero.

Escuchar y hacer

Escucha e imita: Podrías enseñar los animales en inglés, luego el instructor pronuncia el nombre de un animal en inglés y los niños deberán emitir el sonido que hace el animal. Esta actividad es muy divertida para los niños de 4 a 6 años.

Con esta actividad puedes enseñar los verbos, por ejemplo cada vez que digas “cook” los niños deberán hacer como si cocinaran, al escuchar “clean” van a fingir que limpian y así con cada verbo.

Escucha y escoge: Puedes elaborar dibujos de los alimentos y cuando pronuncies un alimento específico por ejemplo carrot (zanahoria) el niño deberá seleccionar la tarjeta que contenga el dibujo de una zanahoria.

Escucha y toca: Puedes trabajar con los objetos del salón de clase, el profesor puede decir: “table” y los niños deberán correr y tocar una mesa, así ir nombrando otros objetos: book, blackboard, chair, wall… también se puede practicar las partes del cuerpo, cada vez que el instructor diga “nose” los niños se tocaran la nariz. Podría convertirse en una sana competencia donde el niño ganador sea el primero en reconocer cada palabra.

Escucha y dibuja: Pueden hacer un dibujo guiado, el profesor menciona objetos en inglés y los aprendices dibujar cada uno, esta actividad es ideal para practicar sustantivos tangibles que son más sencillos de dibujar y no para conceptos abstractos o verbos, ya que son más difíciles de hacer. El profesor puede decir “tree” y los niños entenderán que deben dibujar un árbol, si un niño no sabe que dibujar significa que hay que seguir enseñando esa palabra porque todavía no la reconoce. No hay que desanimarse si esto sucede, aunque el niño se guíe de otros para dibujar el árbol ya que no entendió cuando escucho “tree” de todas formas esta practica le está ayudando a asociar la pronunciación con el significado.

Todos los dibujos son buenos, recordemos que no estamos evaluando el dibujo sino ayudando al niño a darle un significado concreto a una pronunciación.

Escucha y colorea: Otra variante es entregarle a los niños dibujos ya hechos pero sin colorear, y las indicaciones se las damos en inglés, señalando de qué color va cada elemento en el dibujo.

Leer cuentos

En el caso de estudiantes avanzados no son necesarias las imágenes o simulaciones, los niños se crearan su propia imagen mental de la historia.

Cantar

¿Qué mejor forma de adquirir vocabulario? Aprendes y te diviertes al mismo tiempo y a los niños les encanta.