Esta última semana me he dispuesto a ver del debut de las grandes selecciones europeas en la Nations League, el nuevo torneo promovido por lo UEFA en el cual las selecciones se enfrentan a rivales de su mismo calibre. Realmente este torneo, aunque pueda ser un poco innecesario y más una fábrica de dinero, me ha permitido ver el nivel de algunas selecciones importantes. Y particularmente me ha sorprendido de forma positiva el rendimiento de la Selección española en sus dos primeros cotejos de este torneo.

España, salvo 45 minutos vs Portugal, dejó una muy mala imagen en el Mundial de Rusia 2018, quizás en parte debido a la inesperada destitución de Julen Lopetegui 2 días antes del debut. Sea como fuere, España afrontó el Mundial con el inexperto Fernando Hierro al mando y el resultado fue una vergonzosa eliminación a manos de Rusia en los 8vos de final en un partido en el que España mostró poco y nada.

Tras el desastre que supuso Rusia, la Real Federación Española de Fútbol debía buscar un nuevo DT que se encargará de iniciar un nuevo proceso, de conducir la renovación definitiva de la Selección. Luis Enrique fue el elegido para estar al frente de esta nueva etapa en España.

Hace apenas poco más de un mes que Luis Enrique tomó las riendas y quizás es muy pronto para apresurarse a sacar conclusiones, pero tras lo visto en estos dos partidos de la UEFA Nations League, esta España ilusiona y mucho.

Tras un comienzo un poco dubitativo, la España de Luis Enrique dominó a Inglaterra como visitante en Wembley y terminó imponiéndose con un 1-2 en el marcador. Y el día de ayer en Elche se salieron con una apabullante goleada de 6-0 vs Croacia. Y aunque es cierto que la Croacia que se presentó ayer no fue ni la sombra del conjunto que fue sub-campeón del mundo 2 meses atrás, pero eso no significa que el rendimiento de España no fuera impresionante.

@marcoasensio10

Aunque esta España conserva su filosofía del juego de asociativo y de toque que ha promulgado los últimos 10 años, pero ya se ve la mano de Luis Enrique quien ha añadido a su juego su toque particular. Al igual que hizo con su Barcelona, el asturiano ya ha implantado en esta selección un fútbol más vertical. Sobre todo en el duelo vs Croacia pudimos ver este detalle al menos en dos de los goles, donde con pases largo o un traslado de balón más dinámico España pudo hacer daño y marcar. Hace 6 años que España lanzara un pelotazo o que el portero saliera jugando en largo era prácticamente un sacrilegio, pero la realidad es que no todo el tiempo hace falta dar 50 toques horizontales para llegar al arco contrario, cuando en dos pases puedes obtener el mismo resultado. No es que España se desprenda del tiki-taka, sino que entiende que también hay otras formas de jugar y las usa según la situación.

Como ya mencione antes, Luis Enrique ya hizo algo parecido en el Barcelona. En su primera temporada, después que se olvidó de sus inventos, se enfocó en darle un juego más vertical al conjunto culé y la verdad es que el resultado fue inmejorable: un triplete de la mano de la MSN. Y la realidad es que el Barcelona de ese año 2015 era simplemente imparable, una de las mejores versiones del equipo culé en los últimos años. Ya después todo se vino abajo, pero hay que reconocerle lo bueno que hizo.

Uno de los trabajos de Luis Enrique será encarar la renovación española. La verdad es que los retiros de Piqué, Iniesta y Silva no pesaron al menos en estos dos primeros partidos. España tiene mucho talento joven, se ve como el DT asturiano ya empieza a confiar en los Gayá, Dani Ceballos, Asensio, Saúl; jóvenes talentos que apuntan a ser claves en este ciclo.

A pesar de ser venezolano, desde pequeño he sido gran fanático del fútbol español y de su Selección, siento una gran afinidad por este país. No quiero apresurarme a encumbrar a esta selección cuando aún no está ni cerca de ganar nada; pero lo que vi me ilusiona mucho. Jamás he sido gran fanático de Luis Enrique como DT, pero tiene mi confianza porque siento que esta generación española puede volver a dominar el fútbol mundial.