Recorriendo Venezuela. Visitando el Delta del Orinoco

Durante los 4 siguientes días realizamos la actividad de ‘’como hacer papel artesanal’’ y la charla sobre reciclaje a 4 escuelas que se encontraban alejadas en el estado delta Amacuro. Todas las mañanas nos paramos bien temprano a cocinar, desayunar y partir a la escuela a impartir nuestro mensaje.

Grupo ProCiencias en la 1ra escuela de Delta Amacuro

ProCiencias terminando su labor en la 2da escuela de Delta Amacuro

ProCiencias en la 3ra escuela de Delta Amacuro

Taller de papel artesanal en la 4ta escuela

Luego de terminar con nuestros talleres al final de cada mañana partíamos en el autobús y decidíamos recorrer un poco la zona para conocer un poco más de esta. Nos dimos cuenta de que el sitio era mas naturaleza que ciudad, en todos los aspectos, lo cual fue algo digno de admirar.

Primero recorrimos el puerto de la ciudad de Tucupita que queda en uno de los tantos ríos que atraviesa el estado, cerca de donde nos estábamos alojando, después de una lluvia y un clima nublado, ciertamente se veía muy agradable.

A las orillas del río

El puerto

Luego llegamos a una de las plazas de la ciudad de Tucupita en donde se encuentra ubicada una de las iglesias, la cual tiene un diseño antiquísimo, y que, rodeada de los arbustos, arboles y resto de la vegetación le hacia ver como de la época en que se construyó.

La Iglesia

La Iglesia, otro angulo

Contacto con la naturaleza

Como buen estudiante de biología, no podía falta que cada vez que viera un animal quisiera agarrarlo, observarlo y tenerlo por un buen rato admirándolo. En esta oportunidad, en días diferentes me pude encontrar con una pequeña rana, un enorme escarabajo y camarones saltarines de río, los cuales eran tan transparentes que podias observar sus organos internos.

Pequeña rana

Escarabajo

Camarón

Llegamos a un lugar un tanto alejado de la ciudad, este se encontraba adyacente a uno de los tantos ríos y observamos otro pequeño lugar donde estacionaban los botes.

Pequeño puerto

También aprovechamos de tomarnos una foto grupal en una de las escaleras de la plaza que quedaba en el lugar.

Algo muy peculiar de la zona era que mucha gente se encontraba ‘’viviendo’’ en la calle, casi a las orillas del rio, vivían en familia. La profesora que nos estaba guiando nos comentaba que esas personas vivían así porque lo escogieron, ya que hace tiempo se les habían construido casas para que las personas tuvieran donde vivir, pero estos prefirieron seguir viviendo a las orillas del rio.

De regreso nos detuvimos en un sitio por que estaban vendiendo bolas de cacao; así es, eran bolas hechas de puro cacao que preparaban en un terreno hacia adentro de la vegetación. Decidimos bajarnos y recorrer para conocer, había muchas plantas de cacao, lechosa y cocos.

Adentrándonos entre la vegetación

El ultimo día tuvimos la suerte de que nos invitaron a una hacienda que para llegar se tenia que tomar una lancha y recorrer parte del famoso Rio Orinoco. Así que si, puedo decir que recorrí el Rio Orinoco en lancha, y fue algo estupendo. Una de las cosas que puedo agregar a la lista de cosas únicas y geniales que puedes hacer estando en Venezuela.
Al llegar a la hacienda nos dieron un recorrido por los sembradíos de plátano y yuca; también nos mostraron la siembra de calabacín, el cual crecía de manera exagerada en comparación a lo que estamos acostumbrados a ver es los mercados.

Montándonos en la lancha

Recorriendo el Río Orinoco

Llegando a la hacienda

Volvimos a recorrer en lancha para admirar el paisaje que rodeaba el Río Orinoco. Al volver tomamos un baño a las orillas del Río en donde había muchos camarones saltando y a los lejos podíamos ver las toninas emergiendo y sumergiéndose. Verdaderamente toda una experiencia.

Recorriendo el río por segunda vez

Vegetacíon a lo largo del río

Recorriendo la hacienda

Bañándonos en el Río Orinoco

Al llegar al sitio en donde nos alojábamos compartimos una cena con una gente maravillosa, la cual estaban acostumbrados a pasar allí las noches del fin de semana reunidos. Eran personas mayores, amigos de hace años, el cual uno de ellos acondiciono el lugar y lo llamo el club de los amigos; esta persona muy amablemente nos presto ese lugar para que pudiéramos hospedarnos.

Ultima noche

Foto de despedida

Luego de esto al día siguiente nos devolvimos a la ciudad de Caracas, terminando así nuestro viaje de Delta Amacuro.

Fotos propias, tomadas desde Motorola Moto G 2da generation