La Infidelidad: ¿Perdonar y Continuar?

merryslamb (59)in #cervantes • 5 years ago (edited)

La infidelidad es un tema controversial, y que en la actualidad con los avances tecnológicos desafortunadamente es más común que en otras épocas, pero sigue causado una terrible desmoralización para la persona afectada.

FUENTE

La infidelidad tiene que ver con las mentiras, engaño, y a la práctica de mantener una agenda oculta, a comportarse de manera distinta, según la presencia o ausencia de la pareja.

Cuando se comienza el intercambio fuera de lo común de mensajes de texto o fotos subidas de tono con alguien que no es tu pareja ya estamos engañando. Si no tuviera nada de malo lo haríamos frente a nuestra pareja. Y, sin embargo, estos actos se cometen a escondidas, porque sabemos de antemano que tales coqueteos e incitaciones despertarían la ira de esa persona si esta se entera, y con toda razón.
La infidelidad no es más que un engaño, una traición a la relación que se tenga, a la confianza depositada, incluso se hacen daño a sí mismos y no solo a la pareja. Ser infiel implica violar los acuerdos y compromisos de respeto mutuo, con lo cual se pierde el derecho a exigir confianza, cariño, atención y respeto.
Los derechos se pierden cuando se incumplen los deberes. Esto es temporal. Mientras dura el proceso de recuperación de confianza, el infiel debe cumplir con las condiciones establecidas por la pareja afectada, a saber:

FUENTE

Brindar explicaciones sinceras que respondan a todas las preguntas (el nivel de detalles queda a discreción de la pareja traicionada).
Hay que hablar de las causas de la infidelidad, no solo del hecho en sí (no culpar a los demás). ¿Por qué lo hice?
Disculpar no es suficiente. Hay que sentir verdaderamente el sentimiento de arrepentimiento (proceso emotivo en el que uno se conecta emocionalmente con el dolor y pena de la pareja, esto es necesario para no repetir el proceso).
Reparar el daño que se ha causado a la otra persona. No basta ser honesto y tener buena fe. Hay que enmendar, compensar a la pareja por la fractura de la relación.
La traición no es algo que se pueda tomar a la ligera y necesita la intervención de consejeros profesionales, y no de cualquier amistad o familiar que desee lo mejor para ti. Los inexpertos en materia de psique humana probablemente suministren opiniones basadas en vivencias y creencias propias y ajenas, mas no profesionales. Las contradicciones y confusiones aflorarán generando decisiones equivocadas. Esto equivale a automedicarse o preguntar a algún amigo por medicamentos para úlceras gástricas.
El sexo no es aconsejable mientras el afectado tenga depresión y desconfianza en sí mismo. Es absurdo pretender la reconciliación y el perdón instantáneo, aunque se cumplan los pasos anteriores. Las heridas emocionales son las más difíciles de sanar, requieren un período de cicatrización y sanación. Es iluso perdonar a quien sigue mintiendo, engañando, ocultando y negando ciertos aspectos de su vida, a menos que se opte por la ruptura. Pero, mientras convivan, deben cumplirse los pasos anteriores.

FUENTE

Más de la mitad de los matrimonios con infidelidades reincidentes terminan en divorcio, o juntos y amargados. El objetivo no es continuar conviviendo en condiciones destructivas, ni con dudas permanentes. La meta es sanar, perdonar y recuperar la confianza. Esto no es sencillo ni se debe desestimar. Pasar la página, reprimiendo emociones, no es la solución. Algunos infieles esquivan suministrar detalles del incidente para no lastimar. Sin embargo, es preferible aclarar la cruda realidad, antes de mantener las dudas y la desconfianza. Es preferible que tu pareja sepa todo, que se drene sus sentimientos, descargue su ira completa y quede liberado de su dolor y rabia, de esta manera podrá notar tu sinceridad, a que guarde su resentimiento, dudas y piense que estas mintiendo. No hay recuperación autentica de matrimonio sin honestidad y arrepentimiento.

SOURCE

¿Quieres recuperar tu relación después de una infidelidad? Todo va a depender de la gravedad de la traición, de los sentimientos que tengan ambos, del cumplimiento de las recomendaciones que se dieron anteriormente. Es factible. Obviamente, una segunda oportunidad que trae consigo, eliminar todos los problemas que pusieron en crisis la relación. No se puede reestablecer una relación si nos comportamos de la misma manera.
La honestidad implica ser transparente contigo mismo y con tu pareja. Vale la pena dar segundas oportunidades cuando hay verdadero amor e hijos de por medio. Las relaciones cuando comienzan esa etapa de transformación tiene que readaptarse mutuamente, crecer juntos, perdonarse, conservar el diálogo y comunicación diaria, avivar el romance con detalles agradables y frecuentes. Hay que estar abiertos a un nuevo comienzo si se toma la decisión de perdonar. Si ese no es el caso pues entonces lo mejor será asumir las consecuencias de sus actos y marcharse.