Hola mis amigos de steemit , hoy quiero compartir con ustedes un maravilloso estudios del porque Dios a veces nos hace esperar , espero que sea de bendición para sus vidas como lo fue para la mía .

Esperar es lo más difícil

Salmo 27:14 dice: "Aguarda a Jehová; esfuérzate, y aliéntese tu corazón; sí, espera a Jehová".

Las lecciones son parte de la vida que nunca acaban. Aunque la educación formal llegue a su fin, nunca dejamos de aprender lecciones vitales. Las verdades que Dios nos enseña afectan el desarrollo de nuestro carácter, las decisiones que tomamos, y nuestro estilo de vida. Su influencia trasciende nuestra vida terrenal, hasta la eternidad.
Una de las lecciones más difíciles en cuanto a la fe que aprenderemos en esta vida, es esperar en el Señor. Quizás usted está enfrentando ahora una decisión crítica y no sabe qué camino tomar, o tal vez ha estado orando por un asunto, pero Dios no le ha respondido. ¿Se trata de una situación difícil o dolorosa que lo está consumiendo?
En esos momentos, lo único que queremos es tener dirección o alivio inmediato, pero Salmo 27.14 dice: "Aguarda a Jehová; esfuérzate, y aliéntese tu corazón; sí, espera a Jehová". Esperar en el Señor significa mantenernos en nuestras circunstancias o condiciones presentes hasta que Él nos dé más instrucciones. Lejos de estimular la pasividad, este versículo llama a la decisión activa de descansar confiados en el Señor y en su tiempo perfecto. No es el cese de las actividades, sino la paz de espíritu que nos acompaña durante todo el día.

¿Por qué Dios nos hace esperar?

A veces, no estamos preparados para dar el siguiente paso.
1°Sam 16:12-13“Envió, pues, por él, y le hizo entrar; y era rubio, hermoso de ojos, y de buen parecer. Entonces Jehová dijo: Levántate y úngelo, porque éste es. 13 Y Samuel tomó el cuerno del aceite, y lo ungió en medio de sus hermanos; y desde aquel día en adelante el Espíritu de Jehová vino sobre David. Se levantó luego Samuel, y se volvió a Ramá”
David fue ungido rey siendo joven, pero pasó muchos años en el desierto, huyendo de Saúl. Por medio de todas las dificultades, el Señor depuró su carácter y agudizó sus habilidades para el liderazgo.
Cuando llegó el momento apropiado, Dios lo puso en el trono. Así que claramente la demora en su vida tenía como propósito el prepararlo para su llamado.
La espera es particularmente difícil cuando una situación es estresante, o demanda una decisión. Pero comprender ¿por qué Dios no ha respondido nuestras oraciones?, nos ha dado alivio o dirección, puede ayudarnos a confiar en su sabiduría y tiempo perfecto.
Dios tiene planes para nosotros, pero a veces nos hace detener para cambiar nuestros corazones. Quizás hemos estado tolerando un pecado en nuestra vida, o necesitamos ocuparnos de una mala actitud, o de una manera de pensar pecaminosa. El Señor tiene lugares adonde llevarnos, y conoce aquello que debemos dejar atrás.
Asimismo, Dios puede mantenernos en una situación incómoda, una labor aburrida, o una situación difícil. Pero recuerde esto: Él le está preparando para algo mucho mejor.
Créale a Dios mientras espera, sabiendo que sus planes son buenos. Es posible que los detalles de la voluntad de Dios, no estén todavía donde deberían estar.
Ex 2:11-12 “En aquellos días sucedió que crecido ya Moisés, salió a sus hermanos, y los vio en sus duras tareas, y observó a un egipcio que golpeaba a uno de los hebreos, sus hermanos.12 Entonces miró a todas partes, y viendo que no parecía nadie, mató al egipcio y lo escondió en la arena”
Cuando Moisés vio la opresión de los israelitas, trató de corregir la situación matando a un egipcio abusivo. Pero el Señor usó esta situación para enviarlo al desierto por cuarenta años hasta que murió el rey de Egipto (V23-25). Después puso en acción su plan de liberación, utilizando a un Moisés de 80 años mucho más humilde. El Señor es el dueño del tiempo, y Él lleva a cabo su plan con soberanía. No hay oración o ayuno que haga mover su mano antes de que esté dispuesto a actuar.
La demora del Señor tiene el propósito de aumentar nuestra fe.
Rom 5:3-4 dice: "…sabiendo que la tribulación produce paciencia; 4 y la paciencia, prueba; y la prueba, esperanza".
Si Él nos diera de inmediato todo lo que quisiéramos, nunca aprenderíamos a caminar por fe. Pero cuando lo único que tenemos es una promesa de la Biblia, sin una evidencia visible en la cual confiar, entonces nuestra fe es puesta a prueba. ¿Confiaremos en Él o en nuestras circunstancias? Al aferrarnos confiadamente a la Palabra de Dios, sabiendo que Él nunca ha dejado de cumplir sus promesas, veremos la evidencia de su fidelidad todo el tiempo.
Dios quiere enseñarnos “esperanza”. Nos guste o no, la capacidad de esperar en circunstancias difíciles, es un ingrediente esencial de la vida cristiana. Nuestras tribulaciones tienen el propósito, no de aplastarnos, sino de moldearnos a imagen de Cristo. Cuando soportamos la presión con absoluta confianza en el Señor, con su fortaleza y perspectiva, surgimos pareciéndonos más a nuestro Salvador.
Lo más seguro, es que nuestra atención necesita re enfocarse en Cristo. Es fácil que lleguemos a estar tan concentrados en nuestros asuntos, que nos olvidamos del Señor, pero nada capta tanto nuestra atención como una situación difícil o inquietante. Si Dios no se apresura a darnos una respuesta o a solucionar el problema, entonces, en nuestra desesperación, comenzamos a mirarlo a Él.
Sin embargo, hay una diferencia entre buscar al Señor, y buscar su intervención. Si nuestra única intención es que Él haga a nuestro favor lo que queremos, nos habremos equivocado. Esperar en el Señor significa estar enfocados en Él, no simplemente en el resultado que deseamos.

Cómo debemos esperar.

El provecho de nuestro tiempo de espera dependerá mucho de nuestra actitud y disposición mental.
Filipenses 4:6-7“Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias. 7 Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús”
Ponerse nervioso y caminar de un lado a otro no solo es inútil, sino que perturba emocionalmente. El Señor sabe qué es lo que hay que hacer.
Esperar con paciencia, tranquilidad y confianza. Esta clase de actitud es posible, solo para quienes se han sometido a la autoridad de Dios. Si creemos y aceptamos que Él quiere lo mejor para nosotros, y que todo lo hace para nuestro bien, entonces podremos descansar en su derecho de elegir el método, y el momento adecuados. Si verdaderamente confiamos en Él, no lo haremos a nuestro modo, no manipularemos, y no nos apresuraremos.
Descanse en la Palabra de Dios.
Sal 119:160“La suma de tu palabra es verdad, Y eterno es todo juicio de tu justicia”
La Biblia es nuestrosalvavidas en los tiempos de espera. Una de las cosas más sabias que usted puede hacer, es leer las Escrituras todos los días, y pedirle al Señor que le dé pasajes que traigan tranquilidad a su vida. Marque versículos en su biblia, que con toda seguridad le van ayudar en sus tiempos difíciles. No se apoye solo en la oración cuando tenga dificultades o necesite dirección. Aférrese a una palabra específica de Dios, lo que le dará la perspectiva y la promesa de Él para usted. Entonces podrá decir como lo dijo el salmista en el Sal 40:1-3
“Pacientemente esperé a Jehová Y se inclinó a mí, y oyó mi clamor. 2 Y me hizo sacar del pozo de la desesperación, del lodo cenagoso; Puso mis pies sobre peña, y enderezó mis pasos. 3 Puso luego en mi boca cántico nuevo, alabanza a nuestro Dios. Verán esto muchos, y temerán, Y confiaran en Jehová”
Esperar confiadamente, creyéndole a Dios. Después de habernos sometido a Él y anclado en su Palabra, podemos esperar confiadamente en que su voluntad se hará presente. Él sabe exactamente qué hacer y cuándo lograrlo. El Señor tiene el poder de reacomodar cualquier circunstancia, para llevar a cabo su plan. Lo único que tenemos que hacer es, creerle, y esperar su intervención.

fuente

Este estudio esta dividido en dos partes , en la siguiente parte veremos que nos impide nuestra espera , mientras tanto lean y mediten en lo que han leído , y lo que recomiendo es que cuando lo lean tengan una biblia en la mano , para cotejar que nada es sacado de contesto , nunca se queden con lo que dice alguien , siempre verifiquen si lo que están leyendo o escuchando sea realmente así . Dios los bendiga .