Un poco de sur para perder el norte.

in #escritura6 years ago

A la luz de la luna, la playa cobraba otro brillo. Otro aire, otro encanto, e incluso, otra realidad. Alejada de la naturaleza, de lo real. Allí, donde se respiraba tranquilidad, humedad y… ¿magia? Sí, esa era la palabra. Magia. Procedente de la luna, que aquella despejada noche, en inicios del verano, centelleaba junto algunas pequeñas estrellas. Todas ellas suspendidas en armonía, sin peleas, sin prisas. Parecían tan tranquilas…

Bajó la mirada y atisbó la arena que, teñida con el color del cielo, se tendía oscura sobre toda la superficie hasta donde su vista se perdía con la penumbra. Cerca de la orilla, Leticia jugueteaba con sus manos, dentro de los bolsillos de la sudadera, la cual le abrigaba hasta la mitad de los muslos y la protegía de los últimos resquicios del frío nocturno propio de la primavera. Con paso calmado, caminaba junto a la orilla, donde los labios del mar besaban la tierra firme. Alguna ola, rota y distraída, le mojaba los pies desnudos con dulzura. Le gustaba esa sensación. El agua jugueteando entre por sus dedos. Fresca. Se acercó un poco más, justo donde el mar le cubría los tobillos. Se colocó en cuclillas y recogió un poco de esta entre las palmas y se levantó de nuevo. Notando que el mar se advertía más caliente que durante las horas de sol. Su lisa melena hondeaba al viento, una bandera rubia que danzaba junto con la brisa del mar. Una bandera con el significado de la libertad. Separó las manos, abriendo una grieta, por la cual, el agua se escurría con agilidad y bajaba formando una pequeña cascada. Libre. Quedándose en el sitio. Leti alzó la mirada. El horizonte se extendía sinfín. Enigmático. Una manta eterna, tejida con las más delicadas telas existentes, donde la imaginación y las suposiciones eran los factores claves para descubrir lo que debajo, el mar escondía con tanta gallardía. Alejando a los curiosos y castigando a los que se creían más poderosos. Miedos. Angustias. Las horripiladas esperanzas de algún naufrago a la deriva, emulando unos de los papeles de Tom Hanks, solo que... En la vida real. Sin un futuro claro. Inmenso, casi tanto, como las historias y preguntas que se formulaban en la cabeza de Leticia. Incontables. Historias del mar, historias que escribía, historias que presenciaba e historias que borraba. Un santuario para personas como ellas, que buscan un lugar donde refugiarse, pensar e inspirarse. Escrudiñando los ojos fijos en el vasto océano, buscaba algo. ¿El qué? Ni ella misma lo sabía a ciencia cierta. Puede que fuera a alguna promesa nunca cumplida, o un sueño en proceso de cumplirse. Pero no consiguió vislumbrar nada. Y eso le produjo un alivio interno. Un descanso mental. El conocimiento de saber que lo que se esté cumpliendo, sean alegrías, una fogata con amigos, una pareja que acaba de nacer o una que se unen en un mismo ser. Todo, pese a la oscuridad y la soledad del paraje, siempre hay una luz que destacaba. Así se sentía Leticia, en plena conexión con el mundo y ella misma. Allí, donde sentía que la oscuridad no podía ejercer su poder, pese a que lo cubría todo.

– ¿Leti? – pronunció una voz, desde la orilla.

La llevaba observando, desde hace unos minutos. En silencio. No quería interrumpirla. Quería apreciar un poco más aquella figura. Aquella melena rubia que le cubría, hasta la mitad de la espalda, cayendo ágil, arropándola como una madre a su hijo, en una fría de invierno. Aquella figura. Expectante, deseaba ver esa sonrisa. Esos labios pequeños y finos, rosados, que mordía cuando pensaba. Cuando se emocionaba. Que se transformaban en una sonrisa traviesa y jovial, de esas que le arrancaban otra a él. Acercarse y rodearla. Aspirar esa fragancia. Un olor oceánico, fresco, que querrías bañarte en él, una y otra vez, hasta que la piel se arrugaba. Jugar con su pelo entre sus dedos. Ser secuestrado por los mechones y el viento que lo hondeaba.

En la orilla. “Leti”. Su nombre resonaba con fuerza en su mente arrancándola de sus pensamientos y devolviéndola al mundo. Apartándose de ese pequeño mundo que había creado, en exclusividad, para ella.

Sort:  

@felixruano, I gave you an upvote on your post! Please give me a follow and I will give you a follow in return and possible future votes!

Thank you in advance!

Congratulations @felixruano! You received a personal award!

Happy Birthday! - You are on the Steem blockchain for 1 year!

You can view your badges on your Steem Board and compare to others on the Steem Ranking

Vote for @Steemitboard as a witness to get one more award and increased upvotes!

Coin Marketplace

STEEM 0.30
TRX 0.12
JST 0.033
BTC 64029.44
ETH 3157.04
USDT 1.00
SBD 4.02