Suena el rumor de que el viento habló,
se dice que es un chisme del señor sol,
el viento dijo a todos lo que el escuchó,
y el sol ante todos descubierto quedó.

¿Qué mal te hice? El sol reclamó,
gritó furioso al viento chismoso,
y una maldición ante sus ojos le echó,
vagarás por la tierra en toda dirección,
serás invisible y nadie podrá tocarte,
aunque te escuchen no sabrán entenderte,
el polvo arrastrarás contigo,
en los desiertos te perderás en lo vacío,
nadie controlará tu canino,
pero nunca nadie estará a tu lado,
ya no habrá quien escuche tus mentiras,
te sentencio a la soledad eterna.

Desde aquel momento el viento vaga por la tierra,
aunque cante con su sonido agudo,
ya nadie puede descifrar su enojo,
ni podrá jamás contar
aquellos cuentos que del sol quiso delatar.

Pobre del viento que no lo saben escuchar,
nadie lo toca ni lo pueden amar,
que lastima me da el viento siempre vaga sin parar,
pobre del viento por no saber callar,
ahora va por todas partes pero nadie lo ve pasar.

Ese es el destino de los hablan sin pensar,
¿Quién como el viento quiere quedar?
Si hablas de los demás la maldición del viento te caerá.