La Mujer Que Ve Con Los Pies

Rosa Kuleshova nació en 1941 en Nijnii Taghil, ciudad rusa de los Urales, en el seno de una familia cuyos miembros sufrían de ceguera congénita. A pesar de no ser ciega, le resultó muy natural aprender a leer por el método Braille, pasando los dedos sobre los textos especiales. Pero pronto fue evidente que, aunque poseía vista normal, veía también por las puntas de los dedos y por cada poro de su piel. Tal anomalía tal vez fue causada por una tara hereditaria que modificó sus facultades.

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En 1963, Rosa fue llevada al Instituto de Neurología de Moscú a causa de una crisis de epilepsia. El doctor Isaac Goldberg comprobó entonces, lleno de asombro, que la joven leía con los dedos no sólo los textos en relieve del sistema braille, sino también los de tinta o impresos en un libro o periódico. Y realizó varias pruebas con el fin de descubrir cualquier posible engaño.

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Vendaron los ojos de la joven, y ésta, rozando apenas cada línea con un dedo, leyó el periódico dispuesto ante ella. No había fraude. Se trataba de visión por la piel, y no de sensibilidad extrema de una epidermis dotada con una fina red nerviosa. La prueba fue más evidente cuando le presentaron fotos, que fue identificando, describió soldados caminando, aviones, automóviles y hasta los colores de un paisaje. Y lo mismo pudo hacer con la punta de la nariz, con la lengua, y con los dedos de los pies.

¿Qué extraño don poseía Rosa? ¿Leía acaso con su piel provista de células nerviosas desconocidas, sensibles a la luz, o "veía" como los médiums y los videntes? La ciencia no ha podido descubrir todavía nada...