Entreveo la ciudad (Poema) Cuando nos encontramos en la selva de la ciudad.
Entreveo la ciudad.
Acércame suave
al regazo de esa montaña
cuando delgada agua resbale
de altas sendas.
Arráncame el tiempo
aun no es maduro
a la entrada del sueño
rodearme de ausencias.
Junto a ti, tierras llenas
muros de concretos
contemplare lejano
la presencia del día y la noche.
Toma en mi
las palabras menguadas
son silencioas
luces de la ciudad.
Mis pies tienen que llevarme
a esa montaña tan lejana
y veré esas piedras antiguas
donde esta el copioso silencio.
La lectura interesante
hipótesis represiva
nada es casual
pensamiento medieval.
Hay un huésped
aquel amigo oculto
el duende que me habla
que no se deja ver ahora.
Cuando me acerco al lindero
salir de la ciudad
pienso en mi
compartir un espacio común.
Fin.
La muralla que deja afuera los que cuajan con esta normalidad están los locos, los que creamos, donde termina la creatividad donde nos aprietan. Tenemos que trabajar en donde nos desarrollamos para elaborar el yo, puesto que tenemos nuestra historia no es siempre el mismo, no lo concebimos siempre igual.