Cuando reinaba la calma. El capitán se mantiene alerta ante la quietud del oceano, seguía su rumbo al horizonte, al posible lugar donde se guardaba un tesoro prohibido. Mientras llegaba la noche, la marea se hacía más fuerte y el cielo se iluminaba, eran relampagos los que brillaban. Lo hemos encontrado "dice el capitán", la tempestad no podrá detenernos, "exclama".

He dado mi vida buscandote. !!Vamos, abran velas¡¡, sigamos adelante "El tesoro está cerca, dice el Timonel". Yo soy el amo de los mares, nada ni nadie nos detendrá. !!Tierra, tierra¡¡ grita escandalizado un marinero, suelten anclas es la orden inmediata.

El capitán se dirige a la tripulación, busquen en la cueva y en cada uno de los lugares de esta isla. tenemos que encontrar el tesoro, hay que cavar hasta encontrarlo. "No descansen, mantengan la voluntad hasta que llegue el momento de abrir el cofre." profesaba aquel pirata.

Esto ha sido todo por los momentos.

Muchas gracias por su atención