El teatro de sombras de Ende (1988): Un bello cuento infantil sobre la soledad y la muerte

in #spanish5 years ago (edited)


Canela con su ejemplar de El teatro de sombras de Michel Ende, ilustrado por Friedrich Hechelmann y traducido del alemán por Marinella Terzi. Editorial SM, Madrid. 1988. Pp. 9-10 - Foto propia

¿Recuerdan a Michael Ende?

Me gusta recurrir a referencias populares que nos hacen recordar cuán cercanos fuimos, o somos, a ciertos autores u obras que quizá ya no recordamos. Hoy quiero conversarles sobre el libro álbum El teatro de sombras (1988) del autor alemán Michael Ende y el ilustrador también alemán Friedrich Hechelmann. Si no conocemos a Ende por este cuento, tal vez lo recordemos por un famosísimo clásico del cine infantil, adaptación de una novela suya del mismo nombre: La historia sin fin (1984).

Desafortunadamente no encontré una imagen libre de Fújur (Fuchur o Falkor), el cual —o quien— dispararía el recuerdo que busco de inmediato. Tampoco estaba segura de si podía colgar aquí el video o el audio del cantante inglés de Pop de los 80 Limahl, cuyo tema es el ícono musical de tal producción cinematográfica.

Fújur es el dragón blanco de la suerte sobre el cual Bastian aún vuela en la memoria de quienes fuimos al estreno de La historia sin fin (o La historia interminable, o The Neverending Story como se llamó en inglés en su momento) del director Wolfang Peterson en 1984. Esta mágica producción nació de la novela del mismo nombre, de Michael Ende. Aquí una foto del Fújur de utilería original (nada como verlo surcar el cielo):


Imagen para libre uso comercial - Atribución: Towohlfahrt en Wikipedia en inglés (2007)


Suficiente de introducciones. El teatro de sombras (Ophelias Schattentheater en su versión original en alemán) de Michael Ende, magistralmente ilustrado por Friedrich Hechelmann (1988) llega al público infantil hispanoparlante (padres curiosos y demás lectores sensibles) gracias a la eficiente traducción de Marinella Terzi.


Ejemplar de El teatro de sombras de Michel Ende, ilustrado por Friedrich Hechelmann y traducido del alemán por Marinella Terzi. Editorial SM, Madrid. 1988. (Portada) - Foto propia

El cuento comienza así:


Tercio superior de la primera página de mi copia

No es necesario ser Harold Bloom para saber de qué famoso personaje shakespeariano los padres de Ofelia tomaron este triste nombre que tal vez marcó su destino solitario (aquellos que la hubieran olvidado la pueden visitar en las páginas de Hamlet, enamorada del trágico príncipe, hijo de Polonio y hermana de Laertes, triste suicida).

Entonces ¿qué se cuenta en El teatro de sombras de Ende?

El teatro de sombras de Ende (1988) cuenta la historia de Ofelia, una anciana “diminuta” en una “diminuta ciudad” quien ha pasado su vida sirviendo al arte de la mejor manera que pudo: como apuntadora, en vez de actriz (como lo habían vaticinado sus padres apenas nació). Ofelia nunca habría podido actuar en el escenario de un teatro, pues su voz era “demasiado fina”. La llegada del cine y la televisión, entre otras “distracciones”, alejaron a la gente del teatro y este se fue quedando cada vez más solo, igual que Ofelia.

Pronto el teatro cerró y Ofelia fue entonces despedida. Al final de la última obra, la ancianita queda completamente sola en la sala inmensa recordando tiempos más felices. Es entonces cuando las sombras comienzan a aparecer, sombras sin dueños.

Aparte de su propia sombra, Ofelia adoptó entonces a Picardía, Miedo a la Oscuridad, Guadaña Sola, Noche Enfermiza, Nunca Jamás e Ingravidez.

Dejando de lado el mundo y sumiéndose en una creciente soledad; acompañada de una multitud de sombras, su única compañía, Ofelia termina enseñando las obras de los grandes poetas a estas sombras que nadie quería, y ensayándolas con ellas, para que estas dejaran de reñir, pues a veces se peleaban. Y esto resultó muy bien, ya que pronto constituyeron un teatro ambulante.

Excepto por su sombra propia, de día la señorita Ofelia las llevaba a todas en su bolso.

El día que su casero duplicó el costo del alquiler, la señorita Ofelia, quien era muy pobre, no pudo costearlo; entonces, quedó en la calle. Caminó y caminó hasta llegar a una orilla solitaria en la playa. Las sombras sintieron compasión y remordimiento, por lo que decidieron entonces retribuirle sus cuidados. Idearon el teatro de sombras, el cual se convertía en la sensación de cada pueblo que visitaban. Lo único que requería cada función era una sábana blanca que se extendía sobre una barra para tender alfombras.

Ofelia disfrutó de inesperada fama, hasta que un día su auto se atascó en medio de una tormenta de nieve. Fue entonces cuando una nueva sombra apareció. Ofelia le preguntó si quería venir con ella, a pesar de que ya tenía “más de la cuenta”. La sombra insistió en darle su nombre. Era Muerte. Luego de un silencio profundo Ofelia confirmó que aun así la acogería. Muerte la envuelve y Ofelia se siente rejuvenecer; entonces salen a su encuentro todas las sombras que ahora eran luces. las puertas del Cielo se abrieron y Ofelia fue conducida a un palacio magnífico y luminoso; se trataba del teatro más asombroso. "Encima de la entrada ponía con grandes letras doradas:

ESCENARIO DE LUCES DE OFELIA."

Las sombras estuvieron finalmente salvadas y no vagarían más, gracias al altruismo y buen corazón de la señorita Ofelia, quien no pudo ser actriz, pero ofreció al teatro más de lo que sus padres hubieran imaginado jamás.


Dedicado a mis queridos, @marcybetancourt, @leveuf, @salvao y @mllg


Gracias por leer esta parte 1/2.



Posted from my blog with SteemPress : https://marlyncabrera.timeets.com/2018/11/27/el-teatro-de-sombras-de-ende-1988-un-bello-cuento-infantil-sobre-la-soledad-y-la-muerte/


Soy compañera de viaje en


Logo diseñado por @octocel

Y miembro de @talentclub.


Imagen diseñada por @wilins

Visita @provenezuela y conoce más de su proyecto #ProConocimiento.

Haz click aquí para ingresar al servidor de #SteemitSchool en Discord, donde encontrarás la oportunidad de formarte como usuario exitoso en Steemit y de conocer gente maravillosa e interactuar en inglés, español y otras lenguas.

Sort:  

This post contained some typos in its mentions that have been corrected in less than a day. Thank you for your quick edit !

If you found this comment useful, consider upvoting it to help keep this bot running. You can see a list of all available commands by replying with !help.

Checked, @checkey. Thanks ☻

Abrazo recibido y correspondido. ¡Gracias, @mosqueteros! :)

Hermosa historia, mejor presentación. La leí hace unos años porque me la prestaste (o creo que me la presté yo mismo). Conoco más de una niña vieja a quien le haría bien leer este libro, aunque he descubierto que leer entre lineas no es tan fácil como se cree.
Muchos adultos, ajenos a la lectura literaria, dejan pasar las nuances de las historias, solo ven las sombras.

Leer entre líneas no es fácil. Los buenos cuentos infantiles ciertamente comparten esa cualidad de gustar e iluminar incluso a aquellos que se resguardan cómodos en la intimidad de cada línea: se dicen que son textos "maravillosos".

Si, creo que con que gusten y queden grabados es suficiente. Muchas veces la gente recuerda años después un cuento que leyeron de niños y mientras echan el cuento se abre el entrelíneas y caen en cuenta de lo que en su momento dejaron pasar, quizás porque no estaban preparados para verlo.
Ese awareness puede llegar tarde, pero llega.

¿Será que a veces ese awareness no llega? :/ Hace dos días, por pura casualidad, alguien dijo, "no sé qué tanto reconocimiento le hacen a Ende... No es la gran cosa. De hecho, la película fue mucho mejor que la novela" (refiriéndose a The Neverending Story). ¿Debí haberlo defendido? No sé; ¿vale la pena?

Jajaja. No, no creo. In matters of taste...

Gracias por pasarte por aquí y por auto-prestarte esa maravilla de cuento. Me gusta reseñar cuentos infantiles; por un lado, los releo y revivo y, por otro, creo que algún diálogo chévere puede abrirse por allí.

Saludos, querido @hlezama.

Seguro que existen lectores que exigen mucho de lo que leen; quieren explicaciones, dibujos, reiteraciones... Me gusta pensar que la ficción es como un gato, en el sentido que escoge de quien se deja hacer mimos. Además, a la ficción le importa poco si tienes muchas ganas de acariciarla; si no es tu día, no es tu día. Los lectores, por otra parte, tienen pleno derecho de leer lo que quieran y de entender en la misma circunstancia. Pero, pero, pero, que bueno sería tener más lectores que enamoren a los gatos.

Un abrazote :D

:) Excelente analogía. La ficción buena, la que no es didáctica, la que no se disculpa por ser compleja, como los gatos es vista como antipática. Pero, querer que el gato sea perro lo desgata :)

Coin Marketplace

STEEM 0.31
TRX 0.11
JST 0.034
BTC 66772.03
ETH 3237.54
USDT 1.00
SBD 4.25