In memoriam Final Fantasy XV [capítulo primero]

Final Fantasy XV, el título que más he esperado de la franquicia. Aún recuerdo cuando era parte de la grandiosa idea de la ”Fabula nova crystalis" la cual mezclaría su mitología con la de Final Fantasy XIII y Final Fantasy XIII Agito; claro, cuando eso todavía se llamaba Final Fantasy Versus XIII. Pero como dicen: shit happens. Final Fantasy XIII vendió muy bien pero esto se debió al odio que sintió la comunidad por este juego, el cual era lineal y los personajes no eran la gran cosa. Final Fantasy X fue lineal pero la historia y personajes como Yuna y como Auron eran geniales. Es posible que pensaras que Tidus era un pelotudo como protagonista, que lo es porque es molesto e idiota, cuando ya estábamos acostumbrados a tipos serios como Cloud o como Squall, o a sujetos con demasiada carisma como Zidane y Locked; o a chicas misteriosas como Terra. Pero repito, la historia fue genial. Luego vino Final Fantasy XII el cual era demasiado open world en una época en la cual esto todavía no era deseado, pero siendo honestos, mapas demasiado grandes con un sistema de juego como ese incluso en su época era demasiado cansado. Recuerdo que tuve que grindear muchísimo a través de mapas que parecían interminables y llenos de enemigos. Para Final Fantasy XIII a la directiva se le ocurrió hacer una especie de «película interactiva» lo cual traicionaba a lo que eran los juegos de vídeo, en especial a los RPG japoneses.

Luego saldrían dos secuelas del Final Fantasy XIII las cuales no vendieron nada. Pero por años la franquicia casi pasa a llamarse «The legend of Lighting». Ese personaje estaba en todos lados. Incluso en Dissidia pretendieron convertirla en la puta ama. Y no...
Pero por otro lado teníamos a Final Fantasy Ver sus XIII, con su estética obscura en donde estaba involucrado todo el equipo creativo de Kingdom Hearts. Y por supuesto a la compositora Yoko Shimomura y al director Tetsuya Nomura.

Por si no saben quién es Tetsuya Nomura, es el director que tuvo la grandiosa idea de juntar a algunos personajes e historias de Disney con ocasionalmente algunos personajes de Final Fantasy, y en medio de todo esto a tres personajes originales con historias propias las cuales se ven involucrada con las historias de los personajes de Disney. Como en toda historia de fantasía siempre hay un camino que completar y un malo de turno al cual vencer. Eso en el primer juego. Ya para el segundo juego, en donde había de por medio un 1.5 (Chain of memories) el malo que venciste en el primer juego (Ansem) es en realidad la mitad de un individuo llamado Xehanort, y el malo del segundo juego es la otra mitad de dicho individuo, Xemnas, cuyo nombre viene de Ansem invertido y con una X, el cual es el líder de los incorpóreos, seres sin corazón y que hacen un muy profundo juego existencialista que le da profundidad a la trama, pero resulta que a su vez el primer Ansem le había robado el nombre y las investigaciones científicas a un sujeto llamado Ansem, el Sabio (interpretado nada más y nada memos que por Cristopher Lee), mientras que comienzas la partida utilizando a Roxas, un personaje completamente nuevo el cual odias al principio pero al ver que su vida era sólo dolor y sufrimiento comienzas a simpatizar con él. Derrotas a Xemnas. Y ya para otros juegos descubres que Xehanort no era Xehanort si no el corazón de este en el cuerpo de un joven llamado Terra en sucesos que ocurrieron una década atrás. En otras de sus continuaciones hay viajes en el tiempo y descubres que la organización a la cual llevas años enfrentándote realmente no es la verdadera, y que la real consta de cuerpos de Xehanort traídos de distintas eras. Y todavía queda mucho más.

Tetsuya Nomura también dirigió The World Ends With You, un RPG muy genial que recomiendo jugar.

Dicho esto, a priori sabíamos que la historia de este juego iba a ser complicadísima, dramática y existencial. ¿Qué más podía pedir uno?

Regresando a Final Fantasy XV, el juego batió records de venta para la franquicia. No obstante, tampoco fue la joya y la pieza maestra que querían hacernos creer. Y no se debe a problemas estéticos ni a jugabiliad, la dirección está muy bien, aunque entre los primeros capítulos hasta más o menos el 11 se siente un cambio brusco, pero considero que el guión también afecta al producto final debido a muchas sobreescrituras que recibió en diez años. Aunado a eso, de verdad existen cosas en la historia y en la representación de personajes que se siente ya pasada de moda. Aunado a que este juego apuntaba al público occidental y la apariencia de Noctis creo que no era la adecuada y menos con un motor gráfico que apuntaba a que se vieran lo más realistas posibles. No obstante, creo esto lo decidieron arreglar con la versión final de Noctis, diez años después de despertar de dentro del cristal.

Nomura tenia una versión mucho más obscura para el original Versus XIII —y compleja porque ya había viajes en el tiempo—, pero Square Enix quiso que el juego fuera menos obscuro y que vendiera millones. Entonces pusieron a Tabata y todo el trabajo se fue a la puta. No porque Tabata sea malo, de hecho es un gran director. Es innegable decir que Final Fantasy Type Zero es una obra grandiosa que nos hizo llorar a todos incluso pese a las limitaciones de Tabata por parte de Square, y es que con Final Fantasy XV tuvo que hacer que el equipo comenzara a cambiar cosas que ya venían siendo desarrolladas supuestamente de casi una década.

Y creo que lo más imperdonable de todo fue lo siguiente:

Que no hubo escape de Insomnia tal y como nos llevaban casi una década mostrando en trailers.