UN RICO QUE SI ENTRÓ AL REINO DE LOS CIELOS .
Había una vez un anciano multimillonario aquejado por una terrible enfermedad y sabiendo que le quedaba poco tiempo de vida decide viajar y hacer el bien en el primer pueblo que viera.
Es así que llega a Pueblo Hostil y su nombre le quedaba muy bien ya que todos los habitantes tenían cara de asesinos en serie, caras amargas y amarradas, caras tristes , caras preocupadas , caras de entierro en fin caras de nunca haber sonreído.
El noble anciano al instalarse en el curioso pueblo sabía que tenía una gran misión por cumplir pues no soportaba a los vecinos del lugar que iban de un lugar a otro como almas en pena, veía a todos los niños tristes , en fin hasta los payasitos de un circo quedaron sin trabajo y tuvieron que marcharse ya que a aquella gente nada los hacía sonreír.
Bueno, lo primero que pensó el anciano era que solo un milagro podía devolverle la sonrisa al pueblo y se le ocurrió comprear un gran terreno en el centro del pueblo. Hizo traer grandes camiones de tierra de abono y rellenó el lugar con la mejor tierra de siembra, instaló el mejor sistema de riego y sembró las mas bellas y exóticas plantas que al crecer germinaron en las mas bellas flores jamás vistas, aunado a esto sembró plantas frutales que le daban de comer a muchas aves multicolores que todos los días trinaban de lo lindo en lo que ya parecía un parque, es así que todo habitante que pasaba por ahí viendo tanta maravilla esbozaba una linda sonrisa.
Con el pasar del tiempo todo el mundo sonreía en el pueblo, los niños jugaban en lo que ya era un gigantesco parque.
Ya todo el ´pueblo quería a aquel benefactor anciano que le devolvió la risa , la alegría a Pueblo Paraíso el cual era el nuevo nombre del pueblo.
Cuando aquel dulce y adinerado anciano muere y llega a un lugar soñado, extraordinariamente hermoso, lleno de paisajes esplendorosos, gente vestida de blanco y siempre sonriendo, jardines indescriptibles para tanta belleza, ríos y manantiales cristalinos, aves de excepcional belleza; en fin una naturaleza perfecta.
Una poderosa voz lo saca de su asombro:
Bienvenido, regalaste en la tierra a los míos un Parque, les devolviste la sonrisa, ayudastes a que tengan un mundo mejor, gracias a tí conocieron la felicidad y AHORA ES HORA DE QUE TÚ TENGAS TU PROPIO PARQUE, BIENVENIDO AL PARAÍSO.
SI TODOS LOS RICOS DEL MUNDO SE DESPOJARAN UN POCO DE LO MUCHO QUE TIENEN E HICIERAN FELIZ A TANTA GENTE NECESITADA EN EL MUNDO SERÍA MAS FÁCIL QUE UN RICO LLEGARA AL CIELO A QUE UN CAMELLO PASE POR EL OJO DE UNA AGUJA.