El Bardo del Fin

Entre esquinas de un espacio ella se refugia, o mejor dicho… ha condenado a refugiarse.
Llena de una chispa que trata cada día de hacer menos visible por creerla frágil; pero ¿por qué tan delicada?..¿Qué tanto te sangran el deseo, el anhelo y las fantasías?
Oh… entiendo…
¡Me hablas cuando le hablas a la nada dentro de tu almohada!. Sí, sí…
Me resuenas en la nada…en voz baja, aunque igual escucho ese dolor que poco a poco te abre en dos y te hace sentir vacía del miedo. - Luchas y que desenfreno -, casi intentas tomar ese mundo que no entiendes y hacerlo… algo más que un supuesto buen lugar para cuando estas desecha y sin forma ni fuerza.
<<Mmmm, ya entiendo…>>
Eres el alma pura que han infectado de “futuro dudoso”, de ese parásito de desconfianza en forma de personas y promesas, pero también como supuesta pista de para identificar tú miedo a que te fallen.
-Es delicioso probar tanto de miseria y amor- Has perdido y desechado con muchas excusas y con tantas razones y que la podredumbre se está acomodando en tu corazón, sin saber qué haces y aceptándola (o aceptando la estupidez por necesidad de felicidad)
Aprovecho esta pausa para advertirte mi fascinación ante estos cantos de miseria, porque retumban tanto como para entenderte…
¡Como para desear salvarte de mí futura labor al finalizar tus burdos lamentos!