Ciertamente, el presidente de Venezuela; Nicolás Maduro, asume hoy su segundo periodo en medio de una crísis económica cuya inflación -según cifra extraoficial- supera el millón y medio de porciento ; así como el aparente repudio global traducido en el no reconocimiento por parte de Canadá, varios países de la UE, EE.UU y un lobby político denominado 'Grupo de Lima'; éste último conformado por gobiernos de centro y extrema derecha de América Latina.

Se esperaba además que la Asamblea Nacional Constituyente asumiera el rol de juramentador, por ser la institución supraconstitucional; tal como se establece en los artículos 347, 348 y 349 de la CRBV -Constitución de La República Bolivariana de Venezuela- . Sin embargo, de acuerdo al reglamento establecido en el artículo 231 de dicho documento, si la Asamblea Nacional -de mayoría opositora- no está en condiciones para juramentar al presidente o presidenta electa de la república, será el tribunal supremo de justicia quien asuma tales funciones.

Muy a pesar de que las elecciones presidenciales; que ocasionalmente debieron celebrarse a finales del año pasado, fueron adelantadas para el 20 de mayo, el presidente Maduro debía tomar posesión; de manera constitucionalmente obligatoria -establecido en el artículo 231 de la CRBV-, el 10 de enero. Cualquier adelanto de la fecha para dicha ceremonia implicaría una violación de orden constitucional que costaría caro.

El reto de Maduro: Levantar una economía agónica

Habiendo resuelto el tema de la posesión el día de hoy, al presidente de Venezuela le urge resolver el grave déficit económico que atraviesa el país y que superó con creces lo sucedido en la gestión de gobierno de Rafaél Caldera (1994-1999) ;cuya inflación llegó al 104 % en 1996. En los 3 últimos años de su primer periodo, el gobierno de Maduro acumuló una hiperinflación de la cual no se conocen cifras oficiales. Sin embargo, la última cifra oficial obtenida fue de casi 200 % y corresponde al año fiscal de 2016 -si no me equivoco en el año-.

En 2018, se implementó la segunda reconversión monetaria en la historia de Venezuela; la cual consistió en reducir 5 ceros al cono monetario y anclar el valor de dicho cono al precio del criptoactivo Petro en el mercado internacional. En este último punto, el Petro; respaldado en reservas de petróleo, aún no se cotiza en el mercado internacional de criptomonedas debido a una sanción emitida por el gobierno de los Estados Unidos a su homólogo venezolano; lo cual impide a ciudadanos y empresas estadounidenses hacer transacciones por medio de dicha criptomoneda.

Sin embargo, desde su circulación, se ha cotizado en moneda local, lo cual ha hecho que el Petro; cuyo precio establecido equivale al del barril de crudo venezolano en el mercado mundial, pasase de costar 3600 bolívares soberanos a casi 50000 bolívares en apenas 5 meses. Muy a pesar de que el salario mínimo está establecido en 0.5 PTR, dicho anclaje no está representado en la cotización de Petro en el mercado local sino en el impuesto por decreto; en noviembre del año pasado, es decir, medio Petro equivale a Bs. 4500. El salario mínimo real debería ser de Bs. 25000 o medio petro sin importar el precio de dicho criptoactivo. Cosa que, lamentablemente, no es así.

Otro reto: Recuperar el Aparato Productivo e Infraestructura

A Maduro le corresponde recuperar la industria petrolera, cuyo déficit se sitúa en 1.1 millones de barriles de crudo diario. Restablecer la cota de 3 millones de barriles diarios requiere de una inversión de varias decenas de miles de millones de dólares; algo bastante difícil de lograr debido a que por medio de las sanciones impuestas se han bloqueado las fuentes de financiación para cubrir la recuperación.

No obstante, hace varios días se celebraron varios contratos de inversión en la industria petrolera por parte de empresas transnacionales y empresas pertenecientes a países aliados de Venezuela, lo cual podría ser un respiro para recuperar de manera paulatina la industria petrolera.

Otro de los acuerdos celebrados es el del turismo, empresas del ramo de varios países acordaron realizar inversiones a mediano y largo plazo en la recuperación de la industria turística del país.

Mantener los programas sociales

Los programas sociales correspondientes a la asignación de viviendas a las personas con escasos recursos, los programas de alimentación subsidiada y demás programas sociales de envergadura deben sostenerse en caso de que la crisis se acentúe cada vez más.

Por otro lado, se debe eliminar la burocracia y mejorar el combate a la corrupción para lograr una eficiencia en la administración de gobierno. También se debe mejorar la calidad de vida a fin de minimizar el éxodo de venezolanos hacia el exterior.

---

Bien, tal vez me excedí demasiado ahondando en detalle el por qué considero que la toma de posesión se realizó dentro del marco legal. Todo lo que te toca hacer es comentar y -o- debatir al respecto...

---