Los filósofos se preguntan cosas simples pero difíciles de responder, con tal de comprender algo tan complicado como qué es el mundo, nuestra realidad, y en especial, nuestra vida: qué le da significado, qué lo hace hermoso, sus males, y su origen, nuestros orígenes.

Hacen preguntas que cuestionan cada aspecto de tu vida personal, con cruel honestidad y sin importarles que incomodo será: por qué te sientes como te sientes, por qué piensas lo que piensas, y por qué haces lo que haces. Esto será ProVenezuela Digital: Edición Filosofía de la mano de @jc21.ramos

En los ultimos post, hemos hablado bastante sobre la existencia de Dios, pero nos hemos saltado un aspecto casi tan importante como su existencia misma. Su personalidad. Por ejemplo, no sabemos que le gusta o que no, tampoco sabemos exactamente como es él, y ni siquiera tenemos muy claro que quiere que hagamos. A partir de ahora intentaremos dar algunas respuestas teoricas a estas preguntas.

Para empezar, intentemos responder algo "sencillo". ¿Qué puede y que no puede hacer Dios?

Si nos suponemos que es un ser perfecto, como creen todas sus religiones, nos toparemos con varios problemas. Empecemos por sus "poderes" o "atributos divinos" que dicen que tiene. Se dice que es omnisciente, omnipotente, omnipresente, omnibenevolente, y omnitemporal. O en otras palabras, sabe todo lo que puede saberse, existe en todos los tiempos, en todos los lugares, es todopoderoso y ademas, es infinitamente bondadoso. Podrías decir que es sendo tipo. O tipa. No sabemos.

Cabe destacar que estas caracteristicas no son explicitamente mencionadas en la biblia, pero filósofos a lo largo de los años han razonado que tiene que ser así, si es que Dios es perfecto. El problema con las palabras "absoluto", "infinito" y "perfecto", es que cuando lo llevas a los extremos, encuentras que algunos atributos se encuentran con otros, y hace que esta descripción pierda credibilidad.

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Intentemos tocar la mayoría de casos donde sus atributos chocan entre sí.

Creo que el ejemplo más conocido de esto es el famoso "¿Puede Dios crear algo tan pesado que él mismo no puede levantarlo?". Si Dios no puede crear este objeto, esa inhabilidad indicaría que hay algo que él no puede crear. Y si sí lo puede crear, significaría que hay algo que no puede levantar. Sea como sea, hay una inconsistencia con respecto a su omnipotencia. He escuchado a algunas personas argumentando que Dios podría hacerlo, pero no lo hace. Pero esto aun nos deja con la pregunta de qué pasaría si lo hiciera.

Otro ejemplo: la gran mayoría de creyentes asumen que Dios nos dio libre albeldrío, osea, nos deja tomar nuestras propías desciciones. Pero al mismo, Dios es omnisciente, omnitemporal y omnipresente, esto implica que Dios sabe todo lo que ha ocurrido, ocurre, y ocurrirá, en todos los lugares. Sí Dios ya sabe que comeré mañana, sabe que día moriré, y sabe hasta en que posición dormire esta noche, ¿en verdad hay lugar para mi libre albeldrío? Es decir, ya Dios sabe lo que haré, si cambio de parecer a ultimo minuto, ¿no estaría haciendo que Dios se equivocara?

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Una respuesta a esto, es que saber que algo ocurrirá, no significa que tu lo causaste. Por ejemplo, te podría decir que hoy me olvidaré de mis obligaciones y vere netflix hasta quedarme dormido en el sofá, eso no implica que tú me hiciste hacerlo. Y esto va para ambos lados, tanto para eventos negativos como positivos. Solo porque Dios sepa que pasaré una matería con la mayor nota posible, no implica que es el responsable de ello.

El problema con esto es que la fisíca nos ha enseñado que ni tú ni yo no entendemos exactamente como funciona el flujo del tiempo. Ni siquiera estamos seguros de que haya un flujo del tiempo, bien podría ser que el tiempo es una dimensión más, como la anchura y la altura, tal cual como Einstein pensaba. Esto implica que el tiempo no cambía ni varía, y suponiendo que existe un ser (Dios) que puede viajar a traves del tiempo (omnitemporal) de la misma manera que nosotros viajamos en el espacio, parece apoyar esta teoría. Ahora, si bien puede Dios que sepa qué ocurrirá en un futuro, y si bien esto no implica que él decidio en que consistirá ese futuro, aun así nuestro "libre albeldrío" se va por la borda ya que no hay un futuro y un pasado, solo hay un "atrás" y un "adelante" en el flujo del tiempo.

Otro problema, si Dios ya tiene un plan de acción y sabe que es el mejor resultado (omnisciente), tiene la capacidad de llevarlo a cabo (omnipotente), y ademas tiene las mejores inteciones (omnibenevolente), ¿qué sentido tiene rezar? ¿Qué sentido tiene suplicarle para pasar un examen si Dios ya decidió que nota sacaras, que nota mereces sacar, y ademas, que nota es la que mas coincide con sus planes? Es decir, si Dios ya sabe qué es lo mejor que podría pasar, ¿por qué rezas para que cambie de idea?

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Santo Tomás de Aquino, el creador de los argumentos que discutimos la semana pasada, ademas de ser el creador de los atributos que hemos comentado en este post, dio una respuesta con la que yo coincido, aunque sea en parte. Él argumentó que realmente no podemos afirmar nada acerca de un ser perfecto, de Dios, ya que todo lo que lo rodea está en un nivel mucho más alto que el de nuestra compresión. Cuando hablamos de omnitemporal u omnipotente, solo podemos recurrir a analogías pero estas nunca serán precisas, ya que al final del día, no somos buenos a la hora de conceptualizar absolutos como infinidad o perfección.

Pero esto aplica solo si suponemos que Dios es perfecto. Ademas que hay que recordar y no olvidar, que en la biblia no dice por ningún lado que Dios sea omnitemporal ni omnibenevolente. Es más, parece indicar todo lo contrario. Se molesta, se enfada, y hasta se sorprende. No sé tú, pero a mi me parecen cosas bastante humanas. Puedo coincidir con Aquino en que nos es imposible entender conceptos como omnipotencia u omnibenevolencia, pero no me cabe en la cabeza como un ser que sabe todo lo que se puede saber del pasado, presente, y futuro, se puede sorprender cuando Adam y Eva, dos personas con fallas como cualquier humano, inocentes porque no tienen ningún tipo de experiencia, caen la tentación. Hasta yo sé que si dejo a mi hermana de 10 años sola por 10 minutos, alguna travesura hará. ¿Cómo el no podría? Y es más, ¿cómo un ser omnibenevolente ser tan misogino?

No soy el primero (ni seré el ultimo) en hacer estas preguntas, David Hume y Fyodor Dostoevsky, hacen algunas parecidas. Por un lado, Hume resalta que un mundo imperfecto, indica un creador imperfecto. Tal como mencionamos la semana pasada, definitivamente hay muchas cosas que parecen no tener ninguna razón, excepto hacer daño. Cantidades increibles de daño. Y no podemos decir que Dios nos quiere mostrar el mal para que valoremos el bien, ya que para muchas personas, no viven para poder valorar el bien. "Lo que no nos mata, nos hace mas fuertes" solo aplica para aquellos que sobreviven. Y esto es exactamente lo que uno de los personajes en el libro "Los hermanos Karamazov" de Fyodor Dostoevsky, Iván Karamázov, se da cuenta. Iván era un fiel creyente, hasta que se pregunta cómo es posible que Dios permita que haya tanto mal en el mundo, y llega a tal extremo de "rechazar" su metaforico ticket al cielo. Parafraseando: "no quiero compartir toda la eternidad con un Dios así."

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Por ultimo toquemos otro caso donde los atributos de Dios parecen chocar. "Si Dios puede hacerlo todo, ¿acaso Dios puede pecar?". Esta pregunta choca con su omnipotencia y su omnibenevolencia, ya que si es un ser infinitamente bondadoso, ¿cómo sería posible que lastime a alguien? pero al mismo tiempo, ¿no es extraño que tú o yo podamos hacer algo que un ser omnisciente, omnipotente, omnipresente, omnibenevolente, y omnitemporal, no puede?

Una forma de verlo es que ciertamente Dios no puede pecar. Y es porque el pecado es un fracaso, y un ser perfecto no puede cometer un fracaso. Otra forma de verlo es mucho mas precupante: podrías argumentar que un "pecado" solo es un pecado para tú y yo, mortales, pero esto no aplica a Dios. Ya que como Dios es omnibenevolante, todo lo que hace es bueno. Pero esta suposición trae consigo una pregunta de más de 2500 años, el famoso Problema de Eutifrón. Este problema proviene de uno de los escritos de Platón, donde relataba un encuentro que Sócrates tuvo en las afueras de la corte, donde estaba a punto de ser enjuiciado.

¿Las acciones correctas son correctas porque Dios las ordena? ¿O Dios ordena acciones correctas porque son correctas?

Esto podría no sonar a que hay mucha distinción a primera vista, pero estos dos escenarios en realidad son bastante diferentes. Esto es todo un dilema. Si eliges la primera opción del dilema de Sócrates, entonces estás aceptando la proposición de que los actos correctos son correctos porque Dios los ordena. Y esto significa que estás aceptando que el mandato de Dios por sí solo es simplemente lo que hace algo correcto.

Así que, desde esta perspectiva, Dios hace la bondad. Y por ende, esto indica que cualquier cosa que Dios ordene está bien. Y quizás te parece bien, porque crees que Dios sólo ordena cosas buenas, como honrar a tus padres y no robar, mentir o matar. Pero si te sabes la Biblia, recordarás que Dios sí que ordena matar cuando le apetece. Por ejemplo, cuando ordenó a Abraham matar a su propio hijo. Y a algunos les molesta la idea de que la moral pueda, en cualquier momento, volverse totalmente diferente dependiendo de lo que a Dios le apetezca ordenar ese día. Todo lo que haría falta es una palabra de Dios, y de repente echarle piña a la pizza sería moralmente correcto.

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Por ultimo, solo quiero volver a resaltar que sé que este es un tema delicado, y en esta edición en especial tocamos muchos puntos sensibles. Mi objetivo no es volver a nadie en ateo ni nada parecido. El objetivo de esta edición es cuestionarnos todo, ninguna creencia debe quedar por fuera, y esto incluye la religión (y muchas otros aspectos de nuestra vida que tocaremos mas adelante). Nuestra meta es asegurarnos que todas nuestras creencias sean 100% nuestras y no impuestas por nuestros padres, sociedad o cualquier otro factor, y la única manera de hacer eso es poder ver estos argumentos y encontrarles contraargumentos que nos dejen satisfechos, como muchos filósofos creyentes en la historia de la humanidad han hecho.

La semana que viene hablaremos mas a fondo del papel de Dios en nuestro sentido de moralidad y ética.