Estrellas y humanos.PARTE 2: Brillar y prevalecer.

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Muchas personas indagan mas de lo que desean sobre si mismos; la necesidad de saber como, cuando y en que aspecto deberían brillar, les invade la mente, y en vez de hacernos luminosos, nos opaca. Las dudas son un factor importante que nos retrasa, y por ende, limita nuestra capacidad de destacar entre la multitud. Si asumiéramos que somos estrellas, dejaríamos estas preocupaciones, las estrellas no se preguntan como, para qué o por qué brillar, solo lo hacen, y lo hacen hasta el fin de sus días y tanto como su capacidad les permite hacerlo. Las estrellas saben que si se exceden, irremediablemente, significaría su propia muerte.

Nadie nunca debe intentar brillar mas de lo que puede soportar porque seria la causa principal de su propia autodestrucción, un ejemplo de esto es el orgullo de la gente, ego, la envidia, la soberbia, el egoísmo; características frívolas que dan la impresión de opacarnos pero nos hacen dar un brillo mas inútil, que en retrospectiva, nos hace consumirnos mas rápido. No toda luz es atractiva, hay alguna que no es ni siquiera apreciable, una luz que lastima solo con el hecho de percibirla, y ese es el tipo de luz que nos hace irradiar este tipo de características y que perdamos la esencia de lo que somos. La simplicidad es lo que nos hace atractivos, una luz pura y simple es mas apreciable que una excesivamente llamativa que no nos deje ver de si quiera donde proviene. Una luz fuerte es apreciable solo de lejos y al acercarnos es incomoda, en cambio un brillo tenue pero pulcro nunca nos lastima.

Cada persona es responsable de su propio bienestar y lo ideal es que cada quien sea tan cuidadoso como para nunca permitir que ese deslumbre negativo lo invada, pero como seres humanos, tenemos preguntas; es común preguntar “¿por qué?, ¿para qué?, ¿en qué sentido?”, es natural, es nuestra humanidad, y gracias a ella hemos llegado a ser lo que somos y a estar en donde estamos. De igual forma no todo es positivo, así como es natural para nosotros preguntar, también es ley natural que todo en exceso sea perjudicial, incluso hasta algo tan simple como las preguntas. Como personas, nos hemos visto en la curiosidad de preguntar cual es nuestro propósito, dudamos de la existencia del mismo e indagamos si estamos en el camino correcto para cumplirlo. Así como las estrellas, nuestro propósito es brillar, en términos mas humanos, nuestro designo es vivir y nuestra travesía personal se basa en descubrir que simplemente estamos aquí y para hallar que hacer con ese hecho.

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