El sol rebota en la pared dorada y todo brilla, ese es el momento de despertar.

Me dormí tarde y tengo mucho sueño, camino hacia el balcón, estoy en el tercer piso, todo se ve hermoso. Mi rinconcito de lectura, aun no sé; cuando estará listo, tengo que preguntarle a Triunfel.

Cada mañana Triunfel se levanta un poco antes del amanecer, para comenzar la labores domesticas y el desayuno. Tenemos un mayordomo, Raúl-, esta de vacaciones con su familia. Él siempre nos ayuda en todo, es un encanto; tiene poco más de 40 años, y es como un tío. Sé de seguridad que le gusta Triunfel, pero no se atreve a declararle su amor.

-Buen día nana-. Le dije apenas la ví.

-Buen día, ¿como amaneció señorita?- Me miró con una sonrisa muy maternal, ya todos sus hijos eran bastante adultos, así que me trataba como su nieta.

-De maravilla,- le respondí - ¿nana?.

-Si querida.

-¿Ya le han dicho los jardineros cuando terminaran su labor? Es que lo he olvidado.

-Pues... fíjese que no.

-¡Oh!, bueno...

-¡Ah! No!- me interrumpió -Recordé que estaría listo para ayer ¿no lo recuerda?, pero no sé si recuerda que hace unos días el clima estuvo terrible para estarse allá afuera todo el día. Por lo que ese día, les dije que no trabajaran, por lo que volvieron al otro día. Al día siguiente llegaron después del mediodía y empezaron tarde, por lo que deberían de terminar entre hoy y mañana.

-¡Esa noticia es excelente!,- le dije eufórica – Creí que faltaba más tiempo. Nana me iré a cambiar y los esperaré, para preguntarles si estará listo hoy o mañana, para hacer los preparativos.- Me fui corriendo a mi habitación a alistarme.

-¡¿Pero preparativos para que? Si se puede saber!- me grito nana desde la cocina.

-¡Para la inauguración del jardín!- le grite desde mi habitación.

Me vestí rápidamente con un lindo vestido, mis medias y zapatos. Me asome por la ventana, el paisaje era hermoso como siempre. Mire las sillas del jardín se veían tan pequeñitas desde el balcón. Detallé de pronto que entre las hojas algo se movía de forma brusca. Creí que era un ave o algún animal que tal vez se quedó enredado entre las plantas. Cuando se liberó me llamo mucho la atención: Era un animalito más pequeño de lo que creía, un insecto grande, voló rápidamente, lo seguí con la mirada, pero que sorpresa ¡tenia ropa! Aquel insecto ¡tenia ropa!

Baje rápidamente al jardín. Cuando llegue no ví nada fuera de lo normal, busque entre los arbustos, luego camine en dirección al bosque. Me sentí como en trance, de pronto recordé al señor diciéndome: “ Cuidado, ten cuidado con lo que te encuentres”, sentí como si me susurrara al oído. Me detuve, deje de caminar, y a lo lejos escuche a nana llamarme:

-¡¿Que esta haciendo?, regresé. Los señores jardineros ya llegaron!-.

Me voltee hacia la casa y una brisa fuerte paso. Tuve mis cabellos en mi cara y una bola de humo paso haciendo círculos rápidamente, desde los círculos ví como paso detrás del señor; que me miraba fijamente en la distancia, y de pronto la brisa se detuvo. Me quede mirando fijamente al señor, cuando nana se interpuso entre nuestras miradas, sentí como se me quitaba un peso de encima y salia del trance, corrí rápidamente asustada a los brazos de nana.

-¿Que le pasa señorita? Se quedó en una nebulosa, tengo rato llamándola- Dijo nana mientras me veía.

-Na...-Me percate de la presencia de las personas que me veían un poco confundidas, y me alejé un poco de ella. - Triunfel es que me llamo la atención una hermosa ave que ví, y es que me emocione tanto al pensar que podría aquella majestuosa ave venir por aquí cerca del jardín. Me llené de emoción y tenía que abrazar a alguien, era necesario.- Me dirigí a los jardineros -Buen día señores,- Todos me saludaron inclinando la cabeza devolviéndome el saludo. -El jardín a avanzado bastante en poco tiempo a pesar de las variaciones del clima, pero quisiera saber para cuando estará listo en su totalidad este amplio jardín. Ya ví que no solo han embellecido la parte de atrás, de la casa sino los costados y el frente. Hermosas las plantas al entrar, gran trabajo señores. En los costados me encantan las figuras que hicieron los arbustos, estupendas. Y el caminito de piedras al bosque, pasando por la laguna artificial, es un detalle soberbio.- de pronto todos estaban confundidos aparentemente ninguno de ellos había hecho ningún camino que diera al bosque, pero aun así proseguí un poco extrañada ante tal reacción. -No pedí muchas de las cosas que hicieron, pero aún así los felicito hicieron un trabajo estupendo.

- ¡Oh! Señorita discúlpeme,– Dijo nana disculpándose. –Es que me pareció apropiado que eso lo hicieran de una vez. Por que se que al ver lo bonito que va el jardín, querría que arreglaron el resto.

- Pues hizo bien Triunfel, pero por favor procure de avisarme la próxima vez.

- Claro por supuesto señorita no se repetirá jamás una cosa así.

- Bien, entonces ¿cuando estará listo el jardín?- Les decía ansiosa a los jardineros.

A lo que un guapo mozo respondió:

- Estará todo listo esta tarde.

- ¡Magnifico!, entonces esta tarde por favor al terminar pasen a la cocina para brindar por este hermoso trabajo.

Entre a la casa más relajada, ya mañana estaría listo. Para mañana haré una pequeña reunión con amistades cercanas, para celebrar y compartir un rato con amigos y vecinos. Cuando estaba entrando el señor me paso por un lado y me susurro:

-**Cuidado, no hicimos ese camino.**

Mis ojos, se abrieron de par en par, mi respiración se acelero y entre rápidamente a la casa.

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