El Consuelo del Perdón.

Estamos sinceramente arrepentidos y muy tristes por haber actuado de esta manera, tal vez hasta nos sentimos peor que el que recibió la ofensa, por eso lo único que trae paz a nuestro corazón es el perdón.

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El perdón trae consigo un consuelo que si no soluciona el problema causado si puede ayudarnos a atravesar esa situación obteniendo aprendizajes profundos para situaciones futuras.

Jamás debemos negar un perdón genuino a alguien, porque tal vez esa persona dependa de ello, una persona sinceramente arrepentida necesitará el consuelo del perdón para seguir sin remordimientos, porque aunque ha cometido un error, también ha reconocido su error y quiere aléjate de eso El consuelo que trae el perdón es lo que ayuda a alguien que ha estado en una situación de arrepentimiento, debemos prepararnos para perdonar y ser perdonados, ya que lo necesitamos tanto nosotros como el otro lado.

Jamás quien tenga la falta de perdón inmersa en su corazón o que no haya recibido el perdón solicitado podrá vivir con serenidad, por eso debemos ser precisos, contundentes, y sobre todo tener la disposición de ser libres, de perdonar y ser perdonados.

Cuando nos sentimos heridos por haber sido culpables de causar daño a otro, lo único que nos puede consolar es recibir el perdón de esa persona, no le neguemos el perdón, porque mañana podemos ser nosotros los que estemos en esa situación, podemos ser parte del consuelo, y siempre que sea necesario también nosotros podemos ser consolados.

El perdón es un acto maravilloso con resultados extraordinarios que cambia vidas, edifica vidas y también libera la vida de quien lo ha dado o recibido, amados, seamos los que pueden consolar, los que dan la mano para que otro se levante y continuar, del tipo que permite que Dios a través de ellos consuele, restaure y anime.