Crea una ruta, sí un camino que tu desees seguir… Uno tuyo ese que te dirija a ser feliz, y a sentirte pleno. No es extraño caminar mis apreciados amigos de Writing & Reviews, aún más cuando tienes el sendero claro que quieres seguir ¡Inspírate en Picasso! ¡Inspírate Cortázar! ¡Inspírate en Isabel Allende! ¡Inspírate en Rousseau! O ¡Inspírate en Mario Vargas Llosa! Pero también puede ser eso que está a tu alrededor que encienda tu llama o en efecto la música que aclamas ¡En mi caso Fake Love e History My Life son mis canciones favoritas!

Los grandes soñadores siempre mantienen posicionamientos equilibrados y operan de forma secular. A que me refiero con una perspectiva orgánica sencillo: “es la visión de moverte en todo el ecosistema valorando cada espacio que te abre las puertas”. Ese movimiento como visión permite que crees lazos sólidos, aparte de una visión de trabajo compartida, la cual, se expande y no es absolutamente cerrada, sino más bien compacta con el flujo de operatividad de Steemit ¡Usted escribe para llegar a muchos! Y también escribe para nosotros en Writing & Reviews.

En este punto entran dos cuestiones fácticas que son: ¡La planificación y la felicidad! Como ha leído esto no es un criterio banal, sino más bien centrado en la salud que se posee como Bloguero. Ciertamente, el tiempo se conjuga, lo más idóneo es planificar el contenido que se publicara, y ese te llene de felicidad. ¡Entre más feliz te haga significa que efectuaste un gran trabajo! Los sentimientos también están sumergidos en nuestras publicaciones por esos son elementales, y en esta casa siempre se valorara tu trabajo.

Cada una son opuestas, pero están conjugadas ¡Usted escribe por razones que son suyas! Si tiene un sueño eso le hace más fácil además de que escribir en Steemit es maravilloso, y divertirse al efectuarlo llena de plenitudes es como si te transportara a un bello y hermoso lugar, pero el punto más emocionante es crear, crear eso que nos gusta, eso que nos apasiona, y enciende esa llama interna como jóvenes escritores. Escribir después de todo es un reflejo del alma, un reflejo de su ser, y un reflejo absoluto de sus esencia. De modo que al solo sentarte a escribir vale demasiado siempre que lo hagas con todo tu ser.