100 gramos de mantequilla.

       200 gramos de harina de trigo.

       100 gramos de azúcar.

       1 huevo.

       1 cucharadita de canela.

       1 pisca de sal.

       En un bol agregamos la mantequilla con el azúcar.

       Revolvemos hasta que la consistencia sea cremosa.

       Añadimos la canela y la sal. Esto se hace en este momento, para que los sabores se integren a la mezcla de forma homogénea.

       Sumamos un huevo entero a la mezcla.

       Batimos hasta que esté muy bien integrado.

       Agregamos la harina de trigo.

       Integramos hasta que se convierta en una masa. Nota: si hemos estado trabajando con una batidora al momento de integrar la harina se debe hacer con una espátula o una cuchara para no batir de mas la mezcla y activar el gluten.

       Para trabajar mejor la masa, la envolvemos el papel film y la dejamos reposando unos 30 minutos en el refrigerador, lo que también ayudara a que los sabores se asienten.

       Tomamos pequeñas porciones de la masa y hacemos bolitas y luego aplastamos haciendo que queden redondas.

       Las colocamos en un molde previamente engrasado y enharinado. Horneamos a 180 grados, entre 10 y 15 minutos.

       Sacamos del horno. Dejamos reposar unos 5 minutos , desmontamos las galletas y servimos.