En el  que los  colores de los  lunes y  viernes  son irrelevantes.

Oh, cómo quiero compartir tal...
Llorando por la noche y por la tarde;
Y fuiste leal a mi.
Olvida ese momento, nadie será devuelto.
Yendo de cabeza hacia la niebla.
Por hechos, todos rendirán homenaje.
Incluso rezar por mucho tiempo
Pero la gente recompensará.
En ese momento, ellos mismos, como caracoles,
Bailando bajo la lluvia entre los charcos.
No lo sé, pero tan enamorado:
Y luego cambiar fondos.
El amor de Cristo calienta nuestras almas.
Mi rango en el ejército es un peón,
Ahora nadie se detendrá en un medio
No le tenemos miedo a las balas...
Tiempo de descanso en metal.
Y la tierra donde miles de bosques.
Sí que allí, me perturbo, pensamientos - un collar.
Estamos en la luz que refleja la esencia.