Cristo ha tomado nuestro lugar.

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Como sustituto, Cristo murió por los malvados, por el pecador, pero observemos lo siguiente con mucha atención: Cristo murió como nuestro representante, como nuestra cabeza.

Así como el primer Adán ha sido la cabeza de de la vieja creación, así Cristo el último Adán es la cabeza de la nueva creación. Así como todos los descendientes de Adán murieron a Dios y la justicia de Adán, y están muertos en delitos y pecados

Y él os dio vida a vosotros, cuando estabais muertos en vuestros delitos y pecados,

Efesios 2:1

Así también todos los descendientes de Cristo, todos los que están en él, toda la nueva creación, murieron al pecado en él cuando él murió y están vivos para Dios en Cristo Jesús para siempre.

Así también vosotros consideraos muertos al pecado, pero vivos para Dios en Cristo Jesús, Señor nuestro.

Romanos 6:11

De aquí, la fe en el hecho de la muerte de Cristo por mi (Un pecador), me trajo liberación de la culpabilidad o Conciencia de pecado.

De otra manera cesarían de ofrecerse, pues los que tributan este culto, limpios una vez, no tendrían ya más conciencia de pecado.

Hebreos 10:2

Así tengo paz. Pero la fe en el hecho de mi muerte y resurrección con Cristo me ha liberado del pecado y tengo FRUTO DE SANTIDAD.

Mas ahora que habéis sido libertados del pecado y hechos siervos de Dios, tenéis por vuestro fruto la santificación, y como fin, la vida eterna.

Romanos 6:22

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8-A La primera opinión hace buenas obras, pidiendo a Dios su ayuda.

8-B La segunda confía en el Espíritu Santo para obrar por y en nosotros.

Respondió entonces Jesús, y les dijo: De cierto, de cierto os digo: No puede el Hijo hacer nada por sí mismo, sino lo que ve hacer al Padre; porque todo lo que el Padre hace, también lo hace el Hijo igualmente.

Juan 5:19

porque nunca la profecía fue traída por voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo.

2 Pedro 1:21

La primera utiliza el Espíritu.

La segunda es usada o inspirada por el espíritu.

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La primera opinión siente una responsabilidad desmedida y vive bajo mucha tensión y mas o menos gloria para si misma, por causa de sus propios esfuerzos.

La segunda reconoce el gobierno sobre los hombres de Dios y descansa la responsabilidad sobré él y no deja de darle toda la gloria.

Porque de él, y por él, y para él, son todas las cosas. A él sea la gloria por los siglos. Amén.

Romanos 11:36

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y dijo: Oíd, Judá todo, y vosotros moradores de Jerusalén, y tú, rey Josafat. Jehová os dice así: No temáis ni os amedrentéis delante de esta multitud tan grande, porque no es vuestra la guerra, sino de Dios.

2 Crónicas 20:15

La guerra es de Dios y nosotros vamos solamente al mandato de él, oh!, la profundidad y gloria de tal lugar en Cristo. Hay una constante dependencia del Espíritu Santo para todas las cosas.

Hablamos pero él nos mueve para hablar, amamos a las almas pero es por su presencia dentro de nosotros, creemos a Dios, pero él nos suple de esa fe. Intercedemos por otros, pero él dirige la oración. Hacemos bien, pero su presencia dentro de nosotros nos ayuda a hacerlo, Dios no nos da un lugar para un poquito de gloria propia, sin embargo, nuestra actividad es sin fin y sin cansancio, y nuestra delicia inexplicable e ilimitada.

Muchas Gracias por compartir esta lectura, deseo que el Espíritu Santo de Dios traiga revelación de su palabra a nuestras vidas.