HERMANOS

     Un hermano es el primer rival que tendrás en la vida, tu primera sensación de celos, con él te debates el amor y la atención de papá y mamá, la cual siempre considerarás desequilibrada hasta el día que te conviertes en padre, y entiendes que a todos los hijos se les quiere con la misma intensidad, aunque no en la misma proporción.

     Tu hermano, es ese al que no soportas tener cerca, pero que añoras si lo tienes lejos, es el que te hacer sentir con el derecho de acabar con su paciencia, pero tú, Dios libre si alguien más se atreve darle un trato similar. Te conviertes en su protector, en su defensor, aunque procuras que él no se entere de tu fragilidad. Es ese que te saca de tus casillas, y te invita a querer matarlo si toca tus cosas o si emite alguna opinión contraria a la tuya, al que durante la niñez acusas con tus padres, pero es el mismo que conviertes en cómplice y socio fraterno de tus aventuras.

     Y cuando llegan a adultos, pasa a ser tu mejor amigo, tu confidente, tu compañero. Allí das gracias a Dios por la crianza que te dieron papá y mamá, que los enseñaron a quererse, a respetarse, a protegerse mutuamente, porque sabían sin duda que algún día ellos ya no estarían más, y sería en tu hermano donde dejarían su estela de amor para ti, su esencia, quizá todo su ser.

_{La fotografía expuesta en este post es de mi autoría.
Cámara: Apple iPhone 7.
Edición: Adobe Photoshop.}