Últimamente he vuelto al dibujo y honestamente, olvide lo bien que se sentía.

En ocasiones pensamos que no tenemos ni tiempo ni espacio y lo ocupamos en cosas importantes de nuestra vida diaria; luego miramos atrás y pensamos en las pequeñas cosas que disfrutamos, las cosas mas sencillas y como las dejamos a un lado.

Dibujar... bueno, dibujar es dibujar. Siendo este el simple acto de tomar un lápiz y un pedazo de papel y comenzar el recorrido a través de el, representando la realidad, nuestros sueños y emociones; siendo así el dibujo, una prueba de carácter según Rene-Jean Clot.

La publicación del día de hoy es acerca del dibujo, enfocándome en el método estudiado por Charles Bargue explicado de la mano del historiador de arte Gerald Ackerman, y el pintor y novelista francés Rene-Jean Clot.

Charles Bargue fue un prolífico artista del siglo XIX, quien vio la importancia del dibujo como una necesidad de buscar aquello que esta por sobre todas las cosas basado en el ideal estético de inicios de siglo fundamentados en el pensamiento platónico acerca del amar la belleza física de los cuerpos desnudos para intentar encontrar "la verdad absoluta" y valores dignos de búsqueda.

Jean Clot no dice que: "Hoy, igual que para los dibujantes de Altamira y Lascaux, los educadores consideran el dibujo como fuente de energía cuyo poder de expresión pone de manifiesto la fuerza espiritual del ser". Esto, no solo desde un punto de vista emocional o expresivo, sino también desde el apartado técnico, preguntándonos lo siguiente: "¿Como podría el alumno afirmar su poder sobre las formas si nunca aprendió a mirarlas, a confrontarlas entre si?"

Estas dos ideas exponen cierta verdad aislada y olvidad por la mayoría de las institutos de arte contemporáneos, principalmente por la diferente perspectiva en torno a la estética del mundo y el arte.

¿Como dibujar? es una pregunta ignorada principalmente porque el dibujar, es un oficio que ha muerto y su dignidad y respeto han sido aplastados con el pasar de los años.

Técnica, medidas, naturaleza, observación y representación son unas de las palabras que han surgido en mis breves estudios acerca de la perspectiva del dibujo de Rene-Jean Clot, y El curso de dibujo de Charles Bargue; palabras que poco a poco han ido moldeando mi pensar y motivos para continuar explorando las posibilidades del dibujo al natural.

Los estudios de Gerald Ackerman acerca del método de Charles Bargue nos ofrece una simple definición del dibujo como: "el acto de escoger elementos críticos de la naturaleza y reproducirlos en el papel mientras se preservan sus relaciones". A pesar del "carácter rígido del dibujo académico" o "el acto de copiar", como son conocidos; este humilde proceso no da la oportunidad de escoger lo que queramos de la naturaleza. En ocasiones esto lo relaciono y aplico al como los expresionistas plasmaron los momentos, al como la pintura caía caótica y controladamente como en una action-painting the pollock, o incluso el como se criticaba la sociedad y la injusticia a través de las obras, bad paintigs y graffitis de Jean-Michell Basquiat.

Un dibujo, la representación de la naturaleza, una escena o un gesto tienen el poder de significar algo incluso en nuestros tiempos, en los cuales buscamos el significado de todas las cosas en los océanos mas profundos cuando en ocasiones se encuentran en las costas mas cercanas.

Para mi, arte es arte en cualquier tamaño, color y forma; ¿es cuestionable? Si. ¿Pero no lo es todo el mundo?

Ackerman continua ofreciendo unas lineas acerca de que tiene que ofrecer el dibujo diciéndonos que: "hay una verdad oculta en el interior de los objetos mas triviales y simples. Esta verdad es la sensibilidad del dibujante o pintor, cuando intenta representar un objeto. Entre todas las virtudes estéticas que mas apreciamos por encima de la honestidad, es la autenticidad del dibujante"

En este punto es necesario mencionar alguna de las características técnicas mas importantes del curso de dibujo de Charles Bargue: