¿Es realmente el aborto la solución?

Aunque la mujer ha alcanzado en los últimos años un mayor control sobre el tema de la fecundidad mediante el uso de diferentes métodos anticonceptivos, todavía falta mucho camino por recorrer sobre todo en aquellos países menos avanzados en materia educativa y de servicios de sanidad.

Por eso todavía anualmente millones de mujeres recurren a prácticas abortivas en todas partes del mundo. Un negocio sumamente lucrativo en el cual muchas mujeres ponen su vida en riesgo porque la actividad a veces se práctica de forma clandestina y sin los cuidados médicos requeridos.

Pero centrándonos nuevamente en el tema, surge la interrogante sobre si realmente la práctica del aborto es el correctivo ante el sexo practicado en forma irresponsable. Desde luego que estamos obviando la práctica del aborto cuando se justifica por razones en las cuales la vida de la madre se encuentra en riesgo, o cuando el embarazo es una consecuencia de un delito como la violación. Me pregunto entonces si aunque el aborto se encuentre legalizado, ¿no debería ser este considerado como un crimen ante un forma de vida completamente indefensa?.

Los defensores del aborto argumentan que este es un mecanismo que evita problemas sociales como el de la infancia abandonada y la posterior delincuencia juvenil. El movimiento feminista señala que la mujer es dueña de su cuerpo, por lo cual puede realizar las intervenciones que así considere conveniente; incluso, otras posiciones afirman que un feto dentro del punto de vista de las leyes no se considera como una forma de vida. Ante esos señalamientos, me pregunto si eso no es más que una excusa para evadir la gran responsabilidad que significa ser madre. También puede ser una justificación simple ante la ineficiencia de los programas de protección del estado para la infancia. Me gustaría saber que opinan ustedes al respecto.