O sea que son nuestras vivencias pasadas las que proyectamos hacia el exterior, pero esta proyección deforma nuestra percepción de la realidad.
En cambio si perfeccionamos todo el contenido acumulado con pasado en nuestro interior encontraremos perfección y solo perfección en el entorno.
Un fuerte abrazo mi querida Graciela!!!
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Nuestra vivencias internas. Esas son las que proyectamos. Una vez ante nosotros, cobran forma, y entonces tenemos que encararlas, lo que supone enfrentarnos a nosotros mismos.
El gran problema que me encuentro es la mente subconsciente, con sus procesos de fondo, actualizando programas que ni sabemos que tenemos. Pero poco a poco lo estamos consiguiendo...