Lugares Mágicos / Emociones en Santa Martha

Desde el interior de la capital, partimos aquella tarde en familia, hacía varios años no nos reuniamos con algunos hermanos, desde los ventanales de la sala de espera divisamos el avión que nos llevaría a la mítica Santa Martha, puerto caribeño y visita obligada para quienes desean apreciar la belleza y encanto del caribe colombiano.

Hemos llegado al hotel, donde la magia apenas empezaba, la límpida y llamativa piscina invito a un buen chapuzón, nuestros padres y los chicos lo disfrutaron; estaba cayendo la tarde, nosotros los adultos tomamos unos cocteles de bienvenida, ¡esperado la cena en buffet, que siempre fue abundante y balanceada, enhorabuena!

Como vivimos en climas fríos sin costa, al hacer el cambio de clima se nos han subido oleadas de calor y esta hermosa piscina no ha bajado la temperatura, al lado de unas cervezas y cócteles suaves para las mujeres. Instantes mágicos en familia, recordando la niñez y momento que nos han marcado de bellos recuerdos.

La aventura caribeña en el mar, al otro día no se hizo esperar, luego de alistar bronceadores y cremas hidratantes, -por aquello de las normas de protección- Algunos se mantuvieron en camisetas, para evitar la directa llegada de los rayos solares. Pero las emociones fuertes estaban por llegar con las caídas en la banana, son 18 minutos inolvidables.

Nos habían promocionado el paseo acuático desde la toma de los planes meses atrás, pero las decisiones se tomaron estando en las playas. Esta parte del caribe tiene las vistas más bellas que hayamos visto, a pocos minutos estás en la montaña, con vistas preciosas al horizonte marino y viceversa desde el agua apreciamos las bellas montañas multicolor.

Ya montados en los inflables, estuvimos de acuerdo en llevar a los niños; pues nos vendieron la idea de la seguridad y la experiencia diferente, una vez halados por la lancha. Pero luego de la primera caída, algunos hemos quedado tontos, las mujeres se asustaron por los niños; pues todos quedamos dispersos en un radio grande para nosotros.

No nos podíamos divisar en el primer minuto, una vez revolcados por la caída y las olas pegandonos en la cara…la locura… creeriamos que fue la emoción más épica y memorable para contar y llorar ante las cambiantes emociones en sólo tres minutos en el tiempo; por las frecuentes caídas que hicieron el show más ameno.

Lamentamos que no se lograron captar imágenes de calidad; la cámara del móvil-celular se ha averiado / apagado. (en la banana) sin embargo, SÍ, son recomendables estas alocadas aventuras en familia, luego de la soledad en la dispersión que a veces sufren las familias, por los caminos cambiantes de las profesiones y conveniencias de cada matrimonio.

Mañana compartiremos otras inmersiones en la encantadora "Perla del mar- Santa Martha" 5 días es poco tiempo para un disfrute más amplio en las diferentes atracciones a conocer. ¡Les dejamos con nuestro virtual abrazo, agradeciendo vuestra atención y comentarios!