Es muy extraño, a pesar de que estaba estresada los primeros dos dias sin luz (me molestaba más el asunto del aire acondicionado y los zancudos matándome que otra cosa), pero vi una extraña unión entre mis amigos, una preocupacion en conjunto, un estrés popular y menos de juzgar. Sin embargo todo se desplomó ya al cuarto día. Llegó la luz pero no habia agua ni internet, tenia mucho trabajo, comencé a llorar, me dio una crisis de ansiedad. Se supone que la desintoxicación de algo debería ser intencional, una decisión propia (cuando hablamos por ejemplo de, desconectarnos de todo y encontrar paz en la naturaleza) pero cuando eso afecta nuestra comida, nuestra felicidad, nuestra estabilidad y sabemos que es algo que está pasando no porque lo queramos sino porque hay gente en el poder jugando con nosotros, es desesperante. Yo apenas voy a los 21 años y quitando mi vida personal y mis experiencias tristes familiares, me desespera muchísimo no haber visto una pizca de larga tranquilidad en toda mi vida donde no sea un sobre esfuerzo o un riesgo hacer lo que te apasione. No he visto la felicidad, la tranquilidad, solo inflación, crisis de ansiedad, necesidad de psicologo, insomnio y preguntas como: ¿Debería quedarme o irme? esa es la parte desesperante. Por cierto, feliz cumpleaños linda! Te abrazo.