Excelente relato, amiga querida! La niñez no conoce de límites, la inocencia no conoce de miedos. Un texto hermosamente escrito, como siempre me encanta leerte. Un abrazo.
Excelente relato, amiga querida! La niñez no conoce de límites, la inocencia no conoce de miedos. Un texto hermosamente escrito, como siempre me encanta leerte. Un abrazo.
Gracias, amiga! Tus comentarios siempre me llenan y me gratifican. Abrazos