Comencé a usarla el 06 de agosto de 2017, con lo que ya la he utilizado un año y un mes. Soy de flujo abundante, por lo que mi gasto en toallas sanitarias era grande, al menos un paquete y medio por mes. La copa menstrual al momento que la compré tenía un valor equivalente a tres paquetes de toallas sanitarias, por lo que al cabo de dos meses de uso ya había alcanzado el valor de las toallas, así que aunque luzca como mucho gasto este se repone rápidamente.

La primera vez que la usé sí fue un poco complicado, digo, un objeto extraño por primera vez introduciéndose en la vagina no es lo más cómodo del mundo, me tomó un rato colocarla adecuadamente pero como no tenía otra opción porque había gastado el dinero de las toallas lo hice, solo fue incómodo el primer día el proceso de colocarla, al sol de hoy me la quito y pongo como si nada. Ojo, solo fue incómodo el manipularla, una vez dentro ni se siente, solo el palito que algunas traen debajo puede causar alguna incomodidad y recomiendo cortárselo dejando como mucho 1,5 cm, al inicio puede dar sensación de seguridad pero la verdad es que ni siquiera se usa, después de todo no pueden halarla por allí, ya que para sacarla hay que romper, introduciendo un dedo o apretando la base, el vacío que se forma gracias al cual no hay filtraciones, si halan por ese palito puede doler o incomodar y probablemente no vaya a salir. Aquí hay muchas instrucciones sobre la copa que les pueden ser útiles para familiarizarse con ella.

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Son muchos los post y las páginas donde se habla acerca de qué es la copa menstrual, así que dejaré una pequeña información que pueden sentirse libres de ir a investigar para expandir sus conocimientos, eso hice yo cuando la conocí, leer mucho:

La copa menstrual, también conocida como copa para la regla o copa vaginal, es un recipiente de silicona médica que se introduce en el interior de la vagina (igual que un tampón) durante la menstruación, adaptándose a las paredes vaginales en todo momento independientemente del movimiento que hagamos, y recoge todo el flujo en el interior de la copa. Fuente

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He leído muchísimas opiniones, la mayoría de las opiniones contrarias se enfocan en el uso de la copa fuera de casa y el tabú en torno a utilizar algo que debe introducirse en la cavidad vaginal. El tabú es algo personal, si no está dispuesta a superarlo poco puedo aconsejarle más que decirle que es su cuerpo, que a lo largo de la vida es tocado por su madre y demás parientes que la hayan cuidado de bebé, por el médico, la pareja, que usted explore esas áreas con fines higiénicos no debería ser un tabú, pero si su problema es con respecto a la higiene en la calle entonces sí tengo algunas cosas que decir:

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Consejos para utilizar la copa menstrual fuera de casa

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Lleva siempre contigo un envase de agua vacío, un pañito y una bolsa plástica: la mejor manera de limpiar la copa menstrual y de asearse luego de usarla no es el papel higiénico, sino el agua y un paño, con ello se asegura de que quede bastante limpia y sin restos de papel que hacen que se pierda el sentido de utilizar un dispositivo tan higiénico como la copa. Puede llenar el envase en el lavamanos o llevarlo ya lleno, como prefiera, cuando la saque asegúrese de mantener los dedos por encima, fuera del camino que recorrerá el líquido por la gravedad, así evitará llenar sus dedos; una vez fuera, la enjuaga con el agua, lo mismo la vulva, secando después con el pañito, que puede guardar en la bolsa plástica para evitar humedecer otras cosas que traiga consigo. Por supuesto puede utilizar jabón, pero no es necesario y no lo recomiendo, podría causar irritaciones, además ¿Acaso se lava con jabón cada que usa papel higiénico? Eso déjelo para lavarse las manos una vez que salga del cubículo.

Mida el tiempo que le toma llenar la copa: el primer día e incluso el segundo es recomendable vaciarla cada dos o tres horas, si su flujo es poco entonces lo descubrirá en los primeros meses de uso y podrá extender este periodo a unas cuatro o cinco horas, siendo el tiempo máximo recomendado hasta 12 horas. No es bueno exceder este tiempo, sim embargo si ocurre no debe asustarse, un par de veces se me ha pasado el tiempo hasta 20 horas y no he tenido ningún problema de salud, la única diferencia que he notado es que si pasa demasiado tiempo la sangre se torna más oscura y de un olor un poco más intenso pero nunca ha sido algo que considere fuera de lo normal o un mal olor (como sí me ocurría con las toallas sanitarias en mucho menos tiempo).

Tómese un momento para verificar que esté colocada correctamente: en mi experiencia personal la copa solo filtra si está llena a rebosar o mal colocada, para comprobar que esté colocada adecuadamente debe introducir los dedos y sentir al rededor de la base de la copa, comprobando que no se sienta el borde superior despegado de las paredes ni deformaciones en la superficie de la copa que evidencien que no abrió completamente, debe abrir hasta tener la misma forma que tiene fuera del cuerpo. En caso de estar mal colocada no es necesario retirarla y colocarla de nuevo, a veces no abre cuando se suelta, una manera de arreglarlo es pellizcar un poco la base e irla girando hasta que se siente un pequeño tirón que dice que abrió por completo, algunas amigas dicen que sienten algo pero no un tirón, si presta atención a las sensaciones de su cuerpo podrá notar fácilmente si quedó bien colocada.

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Ahorro con la copa menstrual

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A este punto quería llegar, ya tengo el tiempo suficiente usándola para calcular esto, quiero ver cual ha sido mi ahorro todo este tiempo. Saquemos la cuenta de quince meses de toallas sanitarias de dos maneras, con un precio estabilizado desde que las compré y con un aproximado del precio conforme fue avanzando la inflación en el país (Venezuela):

El precio del paquete de toallas sanitarias en junio de 2017 que fue cuando compré la copa estaba en 4.500 BsF. La copa en 14.000 BsF. es decir, que aunque tengo trece meses usándola han sido quince desde que la compré, si comprara un paquete de toallas al mes sería: 4.500 x 15= 67.500 BsF. equivalente a casi cinco copas menstruales; pero ya comenté que gasto al menos uno y medio, entonces sería: 4.500 x 22.5 = 101.505 BsF. equivalente a casi ocho copas menstruales. Así que con una economía estable el ahorro ya es considerable, además de ahorrarle al menos doscientas veinticinco toallas sanitarias al medio ambiente.

Ahora, el precio actual de las toallas sanitarias es de unos 6.000.000 BsF. (esos son 60BsS. pero no meteré el cambio de moneda o nos confundiremos) hagamos un estimado en en quince meses de un aumento más o menos gradual entre los 4.500 BsF. y los 60.000.000 BsF. según lo que puedo estimar, recuerden que no las compro desde hace más de un año: junio 4.500, julio 6.500, agosto 7.000, septiembre 8.000, octubre 10.000, noviembre 15.000, diciembre 120.000, enero 600.000, febrero 1.000.000, marzo 1.500.000, abril 3000.000, mayo 3.500.000, junio 4.000.000, julio 5.000.000, agosto 6.000.000, ahora sumemos esa cantidad, para ser práctica sumaré como si utilizara solo un paquete de diez toallas al mes, lo que sabemos ya no es cierto, el gran total es de: 24.771.000 BsF.

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Podemos ver la gran diferencia entre 67.000 BsF. y 24.771.000 BsF., con respecto a los 14.000 BsF. que me costó mi copa menstrual. En la economía venezolana sabemos que esos cambios de precio fluctuaron de muchas maneras, puede que mi información no sea exactamente la correcta a lo largo de esos meses, pero sí el primer y último precio y ya dentro de los 6.000.000 BsF. hay 427 copas menstruales a precio de junio de 2017, imaginen entonces el total real de ahorro que he tenido, dinero que realmente ni siquiera sabría de donde sacar, recordemos que el salario mínimo en Venezuela es de solo 5.200.000BsF.

El precio actual de la copa es de 37.900.000 BsF. esta página que acabo de encontrar, tiene sus precios actualizados al cambio monetario, esta otra dice un precio más económico de 7.100.000 BsF. pero por no estar actualizado no puedo garantizar que ese sea el precio real, quedémonos con el primero. Con este precio, suponiendo que ambos se mantienen, en seis meses ya la copa habrá pagado su precio, de ahí en adelante sería ahorro, y si los precios cambian, que es lo más probable, el ahorro será mucho más considerable en un menor tiempo.

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Desde que compré la copa me he dedicado a enseñarles a otras, ya son más de nueve personas cercanas que la han comprado y ninguna se ha sentido insatisfecha una vez que aprende a colocarla adecuadamente, de hecho las probabilidades de accidentes son mucho menores que con las toallas y además, con el debido cuidado del tiempo, puede utilizarse incluso en la piscina, se puede hacer ejercicio con ella y se puede dormir moviéndose como le plazca, desde mi punto de vista son todas ventajas, realmente les animo a probarla, ayudan a su bolsillo y ayudan al medio ambiente.